El Gobierno de Suecia ha anunciado la eliminación del impuesto ‘verde’ a los billetes de avión, calificándolo de “ineficaz” y perjudicial para los viajeros. Esta medida, que entrará en vigor en julio de 2025, busca fomentar el transporte aéreo y mejorar la accesibilidad en todo el país.
El impuesto 'verde', introducido en 2018, tenía como objetivo reducir las emisiones de carbono y promover un transporte más sostenible. Sin embargo, el Gobierno sueco ha argumentado que el gravamen no ha logrado sus objetivos ambientales y ha tenido efectos negativos en la economía y en los viajeros. Según el primer ministro Ulf Kristersson, el impuesto ha empujado a muchos suecos a utilizar aeropuertos en países vecinos, lo que ha reducido la competitividad de los aeropuertos suecos.
El impacto en los precios de los billetes
La eliminación del impuesto supondrá una reducción significativa en el costo de los billetes de avión. Se espera que los precios bajen en unas 82 coronas suecas (aproximadamente 7,20 euros) por viaje dentro de Suecia, 77 coronas (6,76 euros) por viaje dentro de Europa y unas 325 coronas (28,56 euros) para vuelos de larga distancia, como a Estados Unidos. Esta medida ha sido bien recibida por el sector de la aviación, que ha señalado que el impuesto ha obstaculizado la disponibilidad de vuelos y el crecimiento económico.
Jonas Abrahamsson, director general del operador aeroportuario estatal Swedavia, ha afirmado que la eliminación del impuesto mejorará la competitividad y la disponibilidad de vuelos en Suecia. Asimismo, Dag Waldenström, secretario general de la Asociación Sueca de Transporte Aéreo, ha defendido que existen métodos más efectivos para reducir el impacto climático de la aviación, como el aumento del uso de combustibles sostenibles.
Alternativas sostenibles
Por otro lado, la medida ha sido duramente criticada por grupos ambientalistas y partidos políticos de la oposición. La Agencia Sueca de Protección del Medio Ambiente y el Partido Verde han calificado la decisión como un retroceso en la lucha contra el cambio climático.
A pesar de la eliminación del impuesto, el Gobierno sueco ha reiterado su compromiso con la sostenibilidad y la reducción de emisiones. Se están explorando otras medidas para mitigar el impacto ambiental del transporte aéreo, como la promoción de combustibles sostenibles y la inversión en tecnologías más limpias. El plan de la Unión Europea para aumentar la cantidad de combustible sostenible en la aviación es una de las alternativas que Suecia está considerando para compensar la eliminación del impuesto.