OpenAI ha lanzado una nueva versión gratuita de ChatGPT, GPT-4o, que promete revolucionar la forma en que interactuamos con las máquinas. Esta versión mejorada no sólo es más rápida y eficiente, sino que también posee la capacidad de “ver” y “escuchar”, llevando la inteligencia artificial a un nivel de comprensión sin precedentes.
Desde su introducción, ChatGPT ha sorprendido a los usuarios con su habilidad para generar texto coherente y contextualmente relevante, respondiendo preguntas y participando en conversaciones como si fuera un humano. Sin embargo, esta última actualización ha llevado las cosas un paso más allá, integrando capacidades sensoriales que permiten al sistema procesar y reaccionar a estímulos visuales y auditivos.
Respuestas más precisas y personalizadas
Con esta nueva habilidad, la aplicación puede ahora proporcionar respuestas más precisas y personalizadas. Por ejemplo, puede analizar imágenes y describir su contenido o interpretar comandos de voz, lo que abre un abanico de posibilidades para aplicaciones en educación, atención al cliente y entretenimiento. “Durante los últimos años, nos hemos centrado mucho en mejorar la inteligencia de estos modelos, y se han vuelto bastante buenos”, dijo Mira Murati, CTO de Open AI.
“Pero esta es la primera vez que realmente estamos dando un gran paso adelante en lo que respecta a su uso mucho más fácil, más sencillo. Ahora incluso puede interrumpir a nuestro modelo para matizar la pregunta o realizar otra. Puedes intervenir cuando quieras. También es capaz de detectar nuestro estado anímico por la manera en la que preguntamos”, destaca Murati.
El miedo a los avances
Sin embargo, no todos ven esta evolución con buenos ojos. Algunos críticos han expresado su preocupación por las implicaciones éticas y de privacidad que conlleva una IA con la capacidad de "ver" y "escuchar". Temen que pueda dar lugar a un aumento en la vigilancia y el monitoreo sin consentimiento, y cuestionan cómo se manejarán y protegerán los datos recopilados. “Lo de Open AI y la nueva versión del ChatGPT es una locura. El inicio de nuestra extinción”, señala un usuario en las redes sociales.
A medida que nos adentramos en esta nueva era de inteligencia artificial, queda claro que la tecnología seguirá desafiando nuestras concepciones sobre la interacción humano-máquina. Esta nueva versión no es sólo un paso adelante en la IA, sino también un recordatorio de la importancia de abordar las cuestiones éticas y de privacidad que surgen con cada avance tecnológico.