Cuando Alba Ortiz fue hasta una tienda MediaMarkt en busca de un nuevo móvil estuvo probando varios modelos que había de exposición, lo normal en estos casos. Lo que no esperaba al llegar a casa después de la compra era encontrarse con un dispositivo que, como los que ella misma había probado, era de exposición.
Al abrir la galería del teléfono, esta joven malagueña se sorprendió al comprobar que ya tenía fotos, algo muy extraño en un teléfono nuevo y recién comprado. Pero es que las fotos eran de gente en la tienda, las típicas imágenes que se hacen en tono divertido o simplemente para probar la cámara del teléfono in situ antes de adquirir un producto.
Un móvil de MediaMarkt con fotos en la tienda
Ortiz compró su móvil en una tienda de MediaMarkt en el centro comercial La Cañada en Marbella, Málaga. “Nos estuvo asesorando el típico vendedor. Yo quería el Pixel 8 Pro, pero me dijo que no quedaban con los GB que yo quería. Le dije que no pasaba nada, que me lo compraba en Amazon”, cuenta esta clienta a Consumidor Global.
Fue en ese momento cuando el trabajador se puso a revisar si había alguna unidad disponible y “qué sorpresa” que sí que quedaba uno justamente del color y características que quería Ortiz. “Yo le pregunté si había sido usado de exposición o algo. Me dijo que no, que los que se utilizan de exposición llevan una pegatina naranja detrás que se notaba, aunque se quitara”, describe.
La caja ya abierta y 20 euros de protector de pantalla
Según explica la clienta, la caja estaba abierta porque le habían puesto un protector de pantalla, ya que MediaMarkt vende teléfonos con el cristal templado ya colocado. “Total que al tener ya el cristal puesto pues me cobraron también los 20 euros que cuesta. Accedí porque se lo iba acabar poniendo tarde o temprano”, añade.
En total, una compra de 920 euros para que después en casa se diera cuenta de que en realidad el móvil que le habían vendido como nuevo era de exposición. “Cuando lo abrí, estaba ya configurado y todo. No dijimos nada y seguimos poniendo cosas del móvil. Cuando fuimos a probar a la cámara, vimos que la galería estaba llena de fotos de gente que se las había hecho en la tienda, se veía de fondo”, relata.
Sin solución de MediaMarkt
Tal y como explica Ortiz a este medio, aún sigue a la espera de que MediaMarkt le de alguna solución. “Les llamé porque no es la primera vez que me hacen algo parecido y me dijeron que me mandarían un correo para poder compensarme con algo como disculpas o solucionarlo de alguna manera”, cuenta.
Pero han pasado más de dos semanas y Alba Ortiz no ha recibido ningún mensaje más por parte de MediaMarkt. “Voy a seguir insistiéndoles porque supongo que si siguen así va a pasar el tiempo de garantía y se van a querer olvidar del caso”, augura la joven.
La postura de MediaMarkt
Consumidor Global se ha puesto en contacto con MediaMarkt para preguntar por este caso. Fuentes de la compañía aseguran que el cliente “siempre tiene la posibilidad de elegir entre los productos disponibles” y que en caso de adquirir un producto de exposición “en todo momento es conocedor de que se trata de un producto que estaba expuesto”. Cabe recalcar que en este caso fue la clienta quien preguntó de forma reiterada al trabajador para asegurarse de que no se trataba de un móvil usado.
MediaMarkt añade que “en casos excepcionales, en los que se pueda producir una situación como la comentada, por supuesto trabajamos de forma ágil para brindarles una solución adecuada de forma rápida”. Así, evitan responder con precisión si es normal que se venda un producto de exposición como nuevo.