Mientras cerca del 50% de la población española tiene problemas para llegar a fin de mes, MediaMarkt, que viene de facturar más de 2.300 millones de euros en 2023, ha decidido implantar el redondeo solidario en sus tiendas para que los consumidores puedan hacer una donación a Aldeas Infantiles. Una donación unilateral, pues la cadena alemana no aporta ni un céntimo.
Ahora, cuando los clientes de MediaMarkt pasan por caja, tienen la opción de redondear al alza el importe de su tique de compra y colaborar con la citada oenegé. “Contribuimos junto a nuestros clientes a que más niños y niñas tengan acceso a las herramientas digitales necesarias para su educación y su futuro”, reza el comunicado de MediaMarkt. Un uso del plural (“contribuimos”) que puede llevar a engaño.
El lavado de cara de MediaMarkt
“Contribuir sin rascarse el bolsillo es facilísimo”, ironiza Emili Vizuete, experto en consumo y director del Máster en Comercio y Finanzas Internacionales de la Universidad de Barcelona, sobre la iniciativa del redondeo solidario de MediaMarkt.
Si dicen que contribuyen junto a sus clientes, pero no aportan nada, más allá de facilitar la donación del consumidor, “están induciendo a un posible error y están faltando a la verdad”, critica Vizuete, quien valora la estrategia de MediaMarkt como “un lavado de cara gratuito”.
La postura de MediaMarkt
Consumidor Global se ha puesto en contacto con Apple Tree, la agencia de comunicación de MediaMarkt en España, para saber cómo contribuye la multinacional en el redondeo solidario que aplica a sus clientes y qué cantidad de dinero dona MediaMarkt, de su propio bolsillo, en esta iniciativa con Aldeas Solidarias.
“Hemos activado el redondeo solidario junto a Worldcoo y MediaMarkt colabora ofreciendo recursos materiales, canales y visibilidad a la iniciativa, y ofreciendo a los consumidores la posibilidad de redondear el precio de su compra para donar a Aldeas Infantiles lo que consideren. Además, desde hace años, colabora activamente con donaciones económicas y de productos a diferentes asociaciones y proyectos”, aseguran desde Apple Tree. En resumen: muchas palabras y ningún dinero es lo que aporta la empresa electrónica en esta iniciativa en concreto.
La solidaridad de los clientes, no de la multinacional
¿Por qué no donan parte de sus millonarios beneficios en lugar de recoger los céntimos de los consumidores con el redondeo solidario? “Lo suyo sería que fuese la empresa la que destinase un céntimo de la compra a una oenegé. Así atraería a nuevos clientes. Pero claro, eso significaría asumir ellos la donación, y su objetivo es ganar dinero y hacer negocio”, apunta la consultora y formadora en marketing digital Neus Soler.
“Hay minoristas que aportan lo mismo que el cliente. Pero MediaMarkt no, ellos no contribuyen, es el cliente el que contribuye. El solidario es el cliente”, retrata Vizuete.
Un arma de doble filo
Con el redondeo solidario “puede ser que refuercen la imagen de marca al adoptar una responsabilidad social corporativa. Pero también pueden generar malestar a aquellos consumidores que no pueden donar, porque te ponen en un compromiso”, reflexiona Soler. En opinión de la especialista en marketing, estas estrategias son “un arma de doble filo”.
Desde hace tiempo, Caprabo o McDonald’s, entre otras empresas, ofrecen a sus clientes la posibilidad de hacer una donación, pero “la propia cajera te dice que marques la 'X' si no quieres donar…”, recuerda Vizuete.