Siempre que se coge el coche puede ser que nos encontremos con algún control policial y sea necesario mostrar a los agentes la documentación del vehículo exigida para circular de acuerdo con la ley. Esto es igualmente preceptivo en caso de no ser el propietario del vehículo o que este sea de alquiler.
Hay documentos que son siempre obligatorios, otros que dependerán de la antigüedad del coche y algunos que será recomendable llevar para demostrar que se circula en condiciones de seguridad y de acuerdo con la ley.
Permiso de conducción
El documento individual y personal de la persona que conduce hay que llevarlo siempre en vigor cuando se utilice cualquier vehículo a motor. Tiene que estar en periodo de validez y ser apto para la categoría correspondiente (A, B, C, D, y E).
En su defecto, también serán válidas autorizaciones provisionales que expide la Dirección General de Tráfico (DGT) cuando se obtiene, extravía o renueva el permiso definitivo.
Permiso de circulación
Se trata del certificado de registro del vehículo o certificado de matriculación. Es el documento de ámbito europeo que avala los datos del vehículo (fecha de matriculación, características, uso al que está destinado y la titularidad del propietario).
Desde hace un tiempo, ya es posible llevar en el móvil ambos permisos (conducción y circulación) digitalizados, gracias a la aplicación gratuita miDGT que, además de otros servicios, permite su ddescarga.
La tarjeta de inspección técnica
Es un documento exclusivo del vehículo (no aparece el nombre del propietario) y refleja sus características de homologación (fabricante, modelo, número de identificación, cilindrada, potencia y emisiones).
Seguro
El seguro de daños a terceros es obligatorio para cualquier vehículo desde 2008. Sin embargo, no es necesario llevar la póliza y el recibo del último pago en vigor, pues los agentes pueden consultar telemáticamente este dato. Si bien no está de más disponer de ellos por si hay que realizar alguna gestión en caso de accidente.
Si se pierden los papeles del coche, es necesario acudir a una comisaría para comunicarlo y evitar de este modo las consecuencias de algún uso fraudulento. Después habrá que solicitar los duplicados del original en la jefatura provincial de Tráfico (permiso de circulación) y en la ITV (tarjeta de inspección).