“El 29 de abril me llegó una carta de la Dirección General de Tráfico (DGT) y un documento adjunto de Citroën en el que me pedían textualmente que dejara inmediatamente de conducir su vehículo”, introduce Laura Conde, conductora de uno de los 500.000 coches afectados por problemas de deterioro con los airbags instalados.
El fabricante de vehículos francés y DS Automobiles, ambos pertenecientes al grupo Stellantis, llamaron a revisión “inmediata” a 66.000 modelos C3 y DS 3 (aproximadamente 60.000 C3 y 6.000 DS 3) en España fabricados entre los años 2009 y 2019. En total, entre Europa, África y Oriente Próximo, la cifra de los vehículos dañados supera el medio millón de unidades.
Más de un mes de espera
El coche de Conde, comprado en 2010, tenía que pasar irremediablemente por el taller pues, según la alerta de Citroën en su misiva, “las sustancias químicas de estos infladores pueden deteriorarse con el tiempo exponiendo al conductor y al pasajero a un riesgo de rotura del inflador del airbag con demasiada fuerza en caso de choque, capaz de causar lesiones graves o la muerte”. No obstante, antes debía llegar una pieza clave para reemplazar el airbag.
“Una vez esté la pieza en un taller asociado o de la misma Citroën, te mandan un código con el que pedir una cita para que te cambien el airbag”, explica la agraviada a Consumidor Global. “Pero llevo más de un mes esperando y tampoco me ofrecen la opción de un vehículo de sustitución”, señala Conde que ahora mismo no dispone de ningún coche para desplazarse.
Citroën ya avisó hace casi un año
Lo cierto es que para los afectados, la carta emitida por la marca no fue una completa sorpresa. La primera advertencia llegó el 23 de octubre de 2023, cuando Conde recibió un documento en el que se detallaba el problema de seguridad con los airbags Takata. Aunque se explicó que el riesgo era mayor en áreas con alta humedad y calor, no se prohibió explícitamente el uso del vehículo.
No fue la única. El 14 de marzo, Conde volvió a recibir otra carta de Citroën reiterando la información sobre los airbags defectuosos y proporcionando instrucciones para concertar una cita para el reemplazo. Sin embargo, de nuevo, no se prohibió el uso del coche, lo que generó confusión y preocupación. De esta manera, tras nueve meses desde el primer aviso, se podría decir que el fabricante ha tenido tiempo suficiente para asegurarse un buen aprovisionamiento de piezas.
El seguro no te cubre
Con la última comunicación (la emitida el 29 de abril), se exigió la inmovilización inmediata del vehículo debido al riesgo aumentado con la llegada del calor. “Me limita bastante la movilidad y contacté con Quálitas, mi seguro de coche, sobre la posibilidad de conducir el coche. La persona que me atendió me informó que no podía utilizarlo debido a la orden de inmovilización de la DGT, lo que también implicaba que el seguro no cubriría en caso de accidente”, matiza Conde a este medio.
Jugadas todas las cartas, Conde sólo puede esperar a que le cambien el airbag de su coche. Esta situación ha generado gran frustración entre los propietarios afectados, muchos de los cuales necesitan sus vehículos para trabajar y se han visto obligados a pedir prestado un coche, alquilar uno o depender de taxis. Por su parte, Citroën no ofrece opciones y, en el mejor de los casos, proporciona un coche de sustitución sólo durante el cambio del airbag, un proceso que dura aproximadamente dos horas.
Reclamar los tickets de taxi o la factura del coche de alquiler
El artículo 1101 del Código Civil expone que “quedan sujetos a la indemnización de los daños y perjuicios causados los que en el cumplimiento de sus obligaciones incurrieren en dolo, negligencia o morosidad, y los que de cualquier modo contravinieren al tenor de aquellas”.
Por lo tanto, la reparación del vehículo no excluye la posibilidad de reclamar los daños y perjuicios que este incumplimiento de contrato haya causado a los afectados. Entre los daños reclamables se incluyen los billetes o abonos de transporte público que se hayan tenido que adquirir debido a la imposibilidad de usar el vehículo propio, así como los tickets de taxi o las facturas del coche de alquiler que haya sido necesario utilizar mientras la compañía repara el defecto de seguridad del airbag.
La respuesta de Citroën
En un intento por revelar la realidad que enfrentan los conductores afectados por los airbags defectuosos, Consumidor Global contactó con un concesionario oficial del fabricante francés. Aquí se detallan dos intentos de obtener respuestas claras de Citroën.
Primer intento:
- “¿Me das el número del caso?”.
- “No me acuerdo, pero me gustaría saber cuándo llegará la pieza. Ya llevo un mes sin poder utilizar el coche”.
- (...) [Atención al cliente de Citroën cuelga la llamada.]
Segundo intento tras proporcionar la matrícula del coche de Laura Conde:
- “Vale, ya tengo el número de tu caso aquí. Le voy a dejar un escrito a mi compañero para que se ponga en contacto contigo, ¿vale?”.
- “¿Cuándo llegaría la pieza más o menos? Llevo más de un mes esperando”.
- “No lo sabemos. No podemos dar unas fechas aproximadas porque no lo sabemos”.
- “Necesito un coche para desplazarme…”
- “¿Has intentado llamar para que te den un vehículo de sustitución?”
- “No…”
- “Puedes llamar al concesionario que pusiste de referencia para que ellos te puedan dar un vehículo de sustitución ya que tienes derecho a uno”. [Laura Conde aclara a este medio que sólo ofrecen uno cuando tienes cita en el taller, es decir, cuando ya ha llegado la pieza.]
- “Pero la pieza, ¿cuándo llegará?”.
- “No lo sé, te puede llegar mañana o te puede llegar en 2025”.
Este intercambio resalta la incertidumbre y la falta de soluciones claras para los afectados, quienes siguen esperando respuestas y, lo más importante, la seguridad de sus vehículos.
¿Cuál es la razón del retraso en la entrega de las piezas?
Citroën comunica a este medio que hay varios factores que influyen en el plazo de entrega de las piezas, como “número de vehículos afectados, logística y disponibilidad de talleres, entre otros”.
“Estamos haciendo todo lo necesario para encontrar soluciones que se adapten a las necesidades de movilidad de nuestros clientes”, resalta la marca. “Cada cliente debe completar el formulario en la web para que podamos encontrar la solución específica que necesite y calificar adecuadamente el nivel de urgencia y la necesidad de movilidad”, finalizan.