Zara se ha visto envuelta en una polémica por su última campaña The Jacket. La marca explica en un comunicado que las imágenes han sido retiradas y que “lamentan profundamente” que algunos clientes se hayan “sentido ofendidos”.
El gigante de Inditex había recibido críticas de sus clientes y seguidores en redes sociales debido a unas fotografías en las que las modelos posan con esculturas rotas envueltas en plástico y telas, en lo que parece un estudio de arte.
Una campaña polémica
Algunas personas consideraban que estas imágenes se parecían demasiado a las fotografías que llegan desde Gaza y que son testigo de los miles de cadáveres envueltos que han dejado los ataques israelíes a civiles inocentes.
Después de retirar la campaña, Zara ha publicado un comunicado en Instagram en el que detalla cuándo y cómo se hicieron las fotos. “Después de haber escuchado los comentarios relativos a nuestra campaña de Zara Atelier The Jacket nos gustaría compartir el siguiente mensaje con nuestros clientes”, incia el comunicado la compañía.
Zara se disculpa
“Esta campaña fue concebida en el mes de julio y fotografiada en el mes de septiembre. Presenta una serie de imágenes con esculturas inacabadas en el estudio de un escultor y tiene como único objetivo mostrar las prendas en un contexto artístico”, reza la primera parte del comunicado.
En el mensaje de Zara no se nombra en ningún momento la palabra Palestina o Gaza, pero quiere dejar claro que la campaña se materializó meses antes de que comenzase la ofensiva del ejército israelí a Gaza, que se inició el pasado 7 de octubre.
Una cuenta de Instagram denuncia la campaña
“Desafortunadamente, algunos de nuestros clientes se sintieron ofendidos por estas fotografías, que han sido retiradas, y han visto en ellas algo muy lejano a la intención con la que fueron creadas. Zara siente este malentendido y se reafirma en su profundo respeto por todo el mundo”, remata.
La cuenta de Instagram Diet Prada fue una de las primeras en relacionar a la campaña de Inditex con el conflicto bélico. La cuenta de Instagram, que cuenta con 3,4 millones de seguidores, comparó la foto de una mujer abrazando el cadáver de una niña o niño asesinado con la de una modelo con una escultura envuelta en plástico. El post cuenta con miles de comentarios.