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Zapas Siroko, la cuenta de Instagram que estafa con pedidos falsos: "Me timaron 200 euros"

El perfil sube fotos de zapatillas deportivas que cautivan a los clientes, sin embargo, el producto enviado no tiene nada que ver con lo ofertado y no hay manera de reclamar

Ana Carrasco González

La cuenta de Instagram de Zapas Siroko / CG

“¿Pueden responderme por el pedido que se equivocaron?”, pregunta Elena Cano a la cuenta bautizada en Instagram como Zapas Siroko. Un silencio sepulcral le contesta confirmando que detrás de la galería de fotografías de zapatillas deportivas y chándales de marcas como Nike o Lacoste, hay alguien que le ha timado 65 euros por unas converse rojas de “mercadillo” en vez de las Jordan de color azul que le iba regalar a su hijo por su cumpleaños. Así comienza la estafa ya anunciada en esta crónica.

El pasado 15 de octubre, Cano escribió al perfil para pedir unas Jordan 4 University de la talla 37. En un principio, el tono formal y las explicaciones por parte de Zapas Siroko sobre el precio y el proceso de envío ganó la confianza de esta clienta. “Las tenemos. Te la enviamos en 48 horas. Dime tu nombre completo, teléfono, email y dirección”, escribe la falsa compañía. Ella accede a dar los datos. Luego, una duda la asaltó. “¿Cómo hago el pago?”, cuestiona. “Es envío contra reembolso”, recibe de respuesta. Es decir, el pago se hace cuando se recibe el producto, en lugar de por adelantado. Hasta aquí todo normal.

Lo que pides, lo que te llega

La espera transcurre tranquila y sin incidentes. Alguien llama al telefonillo y un repartidor de una conocida empresa de reparto entrega el paquete. La tranquilidad se transforma en asombro para luego hacer la metamorfosis al enfado. “No es para nada lo que pedí. Son unas converse de mercadillo de color rojo. Eso sí, han acertado en la talla”, se queja Cano a Consumidor Global. Lo primero que se le pasó por la mente a la afectada fue que la empresa se había equivocado, pero que con un mensaje se resolvería. Rápidamente, abre la aplicación de Instagram, se mete en mensaje directo. “Pedí unas bambas y me llegaron otras que no tienen nada que ver”, aclara.

Captura de la cuenta de Zapas Siroko / CG

“¿Hola?”, “Hace unos días hice un pedido, pero ha habido un error”, “¿Hay alguien?”. Lo que antes era una respuesta al momento, ahora era un silencio eterno. Parecía que la persona que se encargaba de contestar por la red social había desaparecido. Elena, ya con la intuición de que aquello era una estafa, le pidió a su hermano que preguntara por otro producto para comprobar que seguían activos. Sus dudas se confirmaron. La respuesta dirigida hacia su hermano le afirmó que la estaban ignorando. No sólo eso, la cuenta acabó bloqueando a Elena.

Zapas Siroko bloquea a Elena Cano / Captura cedida por Elena Cano

Es Siroko con K

Lejos de desistir, la clienta buscó el nombre de la compañía en internet. Dio con una página web y llamó al número de móvil disponible. Explicó su experiencia, pero la persona que atendió la llamada señaló atónito que ellos no le habían enviado ningún pedido. “Sí, sí, habéis sido vosotros a través de vuestra cuenta en la red social”, insistía Elena. Sin embargo, esta vez fue ella la que cometió el error. Pidió el reembolso a una empresa que compartía el mismo nombre: Siroko. Una tienda que no tenía nada que ver, pero que se dedica también a ropa deportiva.

Además, existe otra tienda de calzados que recibe por nombre Siroco. Siroco con c. Ninguna de ellas tenía culpa de la estafa que había sufrido Elena, pero ella no se rindió. Puso una reclamación a Consumo, sin embargo, al no haber número de teléfono, dirección o rastro alguno de la persona física que está detrás de la cuenta de Instagram las opciones son nulas. “Sé que el paquete vino de Oviedo (Asturias) porque el repartidor me lo comunicó. Aparte de eso ya no sé nada de nada de esta gente, pero, aunque no los pillen espero que no caigan más personas en la trampa”, apunta Elena.

Hasta 200 euros de estafa

Por desgracia, como el caso de esta consumidora hay otros más. Uno de los afectados, Dalonso A. asegura a Consumidor Global que le timaron 194 euros tras pedir varios productos que ofrecía la cuenta. Por su parte, Adela Montreal ametralla con comentarios advirtiendo de que son unos “estafadores”. “Envían mierda”, “Todo falso. No compréis nada porque no llega, lo que llega es del chino”, “No contesta nadie ni te devuelven el dinero y te envían una porquería”. Son algunas de las publicaciones de esta usuaria. Montreal no añade ningún comentario en las publicaciones más recientes tras percatarse de que el perfil ha bloqueado la opción de comentar.

Zapas Siroko no contesta a Dalonso A. / Capura cedida por Dalonso A

Por su parte, a Nil H. le estafaron hasta 95 euros por una réplica del chándal de la marca Nike que nunca llegó. También L. Driller afirmaba en una publicación de un chándal de la marca Lacoste que esta cuenta “es de mentira. Pedí este chándal y me llegó un pantalón corto del mercadillo”. Y es que, cuando se hace un pedido por Zapas Siroko, aunque, en un principio, el proceso de envío y pago parezca normal y vaya por buen caudal, la estafa ya está anunciada desde el comienzo de esta historia.