Hace unos días, la estación de metro de Callao se llenó de un inusual olor a chocolate. Este aroma impregnó uno de los pasillos de la estación para promocionar Wonka, la película protagonizada por Timothée Chalamet que se presenta como una precuela de Charlie y la fábrica de chocolate.
La evocación de la fábrica de Willie Wonka a través del aroma a chocolate fue un trabajo de la empresa de marketing olfativo Dejavu Brands, que consiguió que este olor llenase el pasillo con un sistema de nebulización muy original. Así, pasar por allí se convertía en toda una experiencia, y muchos viajeros que pasaban por esta popular estación quedaban impactados.
De la ilusión al “asco”
No obstante, la ilusión inicial que despertó el proyecto parece haberse evaporado, a tenor de algunas críticas en redes sociales. “Lo del olor de Callao por lo de Willy Wonka está guay el primer día, cuando pasas todos los putos días resulta extremadamente asqueroso y empalagoso. Quitadlo ya por favor, no puedo más con el olor y menos a las 7 de la mañana”, decía una internauta descontenta en X (antigua Twitter).
“En el pasillo de Willie Wonka de Callao han aromatizado tipo chocolate y es horrible. Por favor, es too much ya”, decía otro, en la misma línea. “Han hecho una promo de Wonka en el metro de Callao que huele TODO el pasillo de la línea 3 a la 5 a CHUCHE!!😋”, decía otro, más ilusionado.
Cambio de olor
Así, parece que lo que hace unos días era una campaña de marketing innovadora y efectiva ha derivado en algo desagradable. Hay que tener en cuenta, además, que la calefacción y la gran afluencia de viajeros pueden enturbiar el aroma en un pasillo que no es demasiado ancho ni tiene mucha ventilación.
Además, según ha sabido Consumidor Global, diferencias entre las empresas participantes en la acción publicitaria han provocado que se paralice su colaboración, así que el olor y los paneles podrían ser retirados antes de lo estipulado.