Como cada año, las campañas de Navidad de 2020 y de rebajas de 2021 han estado marcadas por el aumento del consumo y la compra de regalos. Sin embargo, esta vez ha tocado vivir unas fiestas totalmente diferentes por la pandemia y la gente ha tenido que cambiar sus hábitos y pasarse al e-commerce.
Así, las ventas online durante la primera temporada de rebajas de este año han aumentado casi un 140 % con respecto al año anterior, según un informe elaborado por Packlink. Estos datos reflejan que el cierre de tiendas físicas ha hecho que la gente se decante por la compra de productos en Internet.
Crecimientos del 200 %
Durante la temporada navideña, el comercio online se ha visto beneficiado por la nueva y extraña normalidad y ha alcanzado una cifra récord en el envío de paquetes. De hecho, las ventas a través de plataformas digitales han aumentado cerca del 200 %.
España se sitúa, con un crecimiento del 36 %, como el tercer país con mayor subida en este tipo de compra.
Moda y tecnología
Según los datos de Packlink, el sector de la moda y los complementos se ha convertido en el líder por segundo año consecutivo en lo que a regalos navideños se refiere. Ha representado el 31% del total de paquetes enviados y gestionados por la plataforma de contratación de mensajería.
Asimismo, el segmento de la electrónica y tecnología se coloca en el segundo puesto, con un 16 % de los paquetes enviados, por delante del sector de la alimentación, con un 13 %, que ha logrado desbancar al de los juguetes.
La caída del comercio minorista
Mientras, la venta al por menor ha sufrido las consecuencias de las restricciones a la movilidad para combatir la pandemia. Los comercios minoristas han visto descender sus ventas el 6,8 % en 2020, una bajada que no sufrían desde 2012. Además, este parón del consumo se ha reflejado en el empleo dentro del sector, que ha experimentado un recorte del 2,4 %, según datos publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La alimentación, sin embargo, ha incrementado sus ventas en el último año el 0,3% respecto al 2019. Las grandes cadenas y superfícies han logrado mantenerse en un nivel similar al que tenían previo a la crisis sanitaria.