El precio de la luz, que durante la segunda mitad de 2021 marcó precios récord, parece dar una tregua. No obstante, en lo que va de 2022 el kilovatio/hora no ha bajado de los 100 euros y los expertos sostienen que los costes elevados se mantendrán, al menos, hasta primavera.
En este contexto de altos precios generalizados, ¿cuál ha sido la reacción de los consumidores? ¿Se benefician las grandes eléctricas o las pequeñas empresas?
Endesa: la eléctrica que pierde más clientes
Eduardo Delgado, director del comparador Roams, explica a Consumidor Global que, a nivel estricto de número de clientes, hay un perdedor principal: Endesa. Hace un año lideraba el mercado español, cedió el trono y se ha dejado, con el terremoto del subidón de la factura, más de 300.000 clientes.
Eso implica que, por primera vez, Iberdrola se convierte en la compañía con más clientes en España. Aunque también ha restado, ha encajado mejor el golpe: unos 170.000 usuarios menos. Desde Endesa han compartido a Consumidor Global una tabla de resultados del tercer cuatrimestre de 2021, a cierre de septiembre, en la que se constata que la compañía perdía un 2 % de clientes respecto a 2020.
El caso de Total Energies
Otra empresa que ha registrado pérdidas de clientes (en este caso no muy acusadas, unos 3.000 usuarios) es Total Energies. No obstante, la compra de la cartera de clientes de EDP le permite no caer demasiado. Desde esta empresa señalan que “algunos consumidores han comenzado a ser más activos en su relación con su comercializadora de energía”.
Esto da a entender que antes había desinterés o, al menos, los cambios menos bruscos permitían cierta pasividad. Ya no. Desde Total Energies especifican que los clientes, cada vez más, “buscan y valoran”. Y buena prueba de ello es el auge de los comparadores. “Nuestra oferta en el mercado libre es barata, limpia y cercana. Cerramos 2021 en el top 3 del comparador de la CNMC, que refleja las de mejor precio”, especifican fuentes próximas a la empresa.
Repsol: la compañía que más clientes gana
En el apartado de las beneficiadas, la que gana más clientes es Repsol, según Roams. “Unos 138.000”, especifica Delgado. Este experto explica que la petrolera lo ha conseguido gracias a una estrategia comercial muy agresiva, con promociones llamativas.
“También llama la atención que MasMóvil haya duplicado su cartera de clientes”, cuenta. Holaluz también registra crecimiento, pero a través de la compra de una pequeña comercializadora. Una de las lecciones que ofrece esta situación, según Eduardo Delgado, es que “hay muchas compañías que han reducido sus tarifas y únicamente ofrecen mercado libre, lo que garantiza que sólo venden por encima del precio de mercado”, relata.
Muertos en el camino
Entre las pequeñas comercializadoras que no han podido aguantar y han desaparecido figuran Aura Energía y Remica, aunque en el futuro podrían ser más. “Lo que observamos es que hay momentos de concentración y momentos de libre competencia, y los primeros casos desembocan en la desaparición de algunas micro distribuidoras”, detalla Delgado.
Por ello, la guerra de precios no seduce a tantos como cabría esperar. “La gente se ha obsesionado con la economía de la suscripción: estabilidad, tranquilidad y pocos sobresaltos”, concluye.