Este 15 de marzo se celebra el Día del Consumidor, una efeméride que tiene su origen en la década de los 60. No es, no obstante, un día elegido al azar por organizaciones de consumidores ni por entidades públicas, sino una jornada que recuerda el 15 de marzo de 1962, cuando John F. Kennedy, presidente de Estados Unidos, pronunció un discurso ante el Congreso en el que habló del consumidor como un actor importante dentro de la sociedad.
Kennedy dijo aquel día que el consumidor era “el único grupo importante cuyos puntos de vista a menudo no son escuchados”, y también argumentó que todos formamos parte del mismo. Dos décadas después, en marzo de 1983, se celebró por primera vez el Día Mundial de los Derechos del Consumidor. Un par de años después, en 1985, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó una serie de directrices para mostrar las líneas maestras de lo que debería ser la protección de los consumidores e instar a los gobiernos a garantizarla.
Salud, seguridad e intereses económicos
Hoy, el día sirve para recordar la defensa de la salud, la seguridad y los intereses económicos de las personas consumidoras, así como el conocimiento de los derechos que le amparan, y también para honrar la labor de todas las instituciones lo protegen.
En este sentido, en España existen Oficinas de Consumo a nivel municipal y autonómico que ayudan a las personas a resolver problemas con empresas: reclamaciones por sobrecostes, demoras, productos defectuosos... Además, la Secretaría de Estado de las Telecomunicaciones y la Junta Arbitral Nacional de Consumo también pueden atender las demandas de los consumidores.