Los delitos cibernéticos están en aumento en España. La guerra en Ucrania también es un caldo de cultivo adecuado para las estafas: casos de phishing, correos electrónicos con información falsa, suplantaciones de identidad… Entre todas las modalidades de fraude, una de las más extendidas es la de las llamadas desde números de Reino Unido que dicen ser inversores en bolsa. Llevan un tiempo en nuestro país y siguen presentes porque generan importantes beneficios.
Estos números destacan por su insistencia (hay personas que reciben varias llamadas al día), por el miedo que despierta en los usuarios que pueda tratarse de mafias organizadas y por el desconocimiento sobre cómo actuar. Si se cae en esta estafa, el daño puede ser enorme, pero los expertos en ciberseguridad apuntan algunas claves que pueden ayudar a los afectados a recuperar el dinero.
Si caes en la trampa de las llamadas desde Reino Unido
Silvia Martínez González, Global Head Expert del máster de Ciberseguridad de la escuela Nuclio, explica a Consumidor Global que, si una persona muerde el anzuelo, lo primero que debe hacer es acudir a la Policía y denunciar. Además, es imprescindible cambiar todas las contraseñas de sus cuentas lo más rápido posible. En palabras de la experta, se trata de un “control de daños” que sirve para calibrar hasta dónde ha llegado la vulneración.
Asimismo, Martínez apunta que es fundamental llamar al 017, “que es como el 016 para la mujer, pero aplicado al ámbito de la ciberseguridad”. Esta línea, operada por el Instituto Nacional de Ciberseguridad, es gratuita y confidencial. Tal y como este organismo detalla en su web, “el servicio es atendido por un equipo multidisciplinar de expertos, a través de las diferentes opciones de contacto, que ofrecen asesoramiento técnico, psicosocial y legal, en horario de 9 de la mañana a 9 de la noche, los 365 días del año”.
El papel de los bancos
Carlos J. Juárez, Inspector Jefe y Jefe de Sección de la Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Comisaría General de Policía Judicial, explica a este medio que la ciudadanía debe ser consciente de que el uso de nuevas tecnologías facilita la vida diaria, “pero conlleva riesgos y una parte de responsabilidad”. Por ello, resalta que no se deben facilitar por vía telemática “datos que permiten acceder a servicios que pueden generar pérdidas de activos del ciudadano. Es una simple cuestión de sentido común”, opina el experto.
Si una persona cae en esta estafa, el Inspector Jefe considera que lo primero que hay que hacer es “taponar la herida”. Es decir, hablar con el banco y “solicitar el bloqueo inmediato de cuentas y tarjetas”, además de la retrocesión de transferencias que ya se hubiesen realizado. “Los bancos tienen acuerdos interbancarios para asistirse mutuamente en estos casos”, detalla el Jefe de Sección de la Unidad Central de Ciberdelincuencia.
La importancia de denunciar
A continuación, lo siguiente es “interponer denuncia en comisaría facilitando todos los datos que pueda conservar de la comunicación recibida, tales como número de teléfono de la persona que llama, correo electrónico, capturas de pantalla en caso de comunicaciones escritas, enlaces a páginas web recibidos en el mensaje, etc”, enumera el agente.
En la misma línea, Silvia Martínez subraya la importancia de la denuncia. “En la Policía, las investigaciones se van acumulando, y a veces se desarticulan bandas completas, pero hasta entonces pasa mucho tiempo”, explica. Por ello, pone el foco en la denuncia, a partir de la cual se puede reclamar al banco. “Hay casos en los que los delincuentes han clonado la SIM y el banco, al final, ha restituido el importe robado”, detalla. A propósito, menciona el caso de una entidad que repuso 13.000 euros a un cliente afectado.
No siempre se recupera el dinero
Pero no siempre se consigue el importe total. Algunas entidades han recibido críticas por negarse a ingresar el dinero estafado a sus clientes, víctimas de un timo. Tal y como explican fuentes del sector a Consumidor Global, las empresas y los seguros se cubren las espaldas y, en su letra pequeña, incluyen excepciones para no hacer frente a los casos que consideran responsabilidad del cliente.
En este sentido, la experta de Nuclio incide en que también existen peritos informáticos que trabajan en el ámbito de la justicia y pueden ayudar a demostrar que una persona ha sido estafada para que consiga, de algún modo, recuperar su dinero.