Pedir una sudadera de Nike y que se la quede un desconocido: Paack siembra el caos con sus envíos

Andrea Fabra también cayó en la tentativa de hacer alguna compra durante el Black Friday. Optó por una sudadera de Nike que, rebajada, le costaba 40 euros. Como ella cuenta, todo iba bien con el pedido hasta que a la semana siguiente le llegó un correo que especificaba que su pedido había sido entregado. Ni ella, ni sus familiares, ni sus vecinos habían recibido nada.

“Yo no estaba en casa, mis padres sí y, además, una de mis hermanas es vecina en la puerta de enfrente. Les pregunté a todos ellos y nadie sabía nada”, relata Fabra a Consumidor Global. Fue entonces cuando se puso en contacto con Paack, la empresa que reparte los pedidos de Nike.

Suplantación de identidad

“Les reclamo y van y me enseñan un albarán en el cual se indica que el pedido se me ha entregado a mí y me indican el DNI. Obviamente no era el mío ni el de mis familiares, me habían suplantado la identidad o se lo habían inventado para excusarse de lo ocurrido”, explica la joven.

Ya había ocurrido antes con pedidos de Decathlon o Zalando y ahora, la empresa de transportes Paack está entregando paquetes de Nike a terceras personas que suplantan la identidad de los destinatarios reales. En el caso de Fabra, Nike atendió rápidamente su incidencia y le compensaron con un reembolso total del pedido.

El calvario para recibir un paquete con Paack

En redes sociales se pueden ver muchos más casos relacionados con esta empresa de paquetería y sus entregas de Nike. Miguel Ángel Romero hizo un pedido online el pasado 22 de noviembre y lo que ha vivido desde entonces es de lo más “surrealista” que ha visto comprando algo por internet, tal y como explica a este medio.

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“En la app me han aparecido mensajes relacionados con el envío de todo tipo. Que si la dirección no es correcta, que si el envío del pedido está en camino, que si el producto está estropeado y tiene que devolverse al remitente, que si vuelve a estar en camino…”, recuerda Romero.

Nike se desentiende

Según este usuario, lo único cierto es que después de varias semanas no ha recibido ninguno de los productos que compró online. En resumen, “una mala experiencia”, critica. “¿Cómo es posible que Nike no cuide más la parte de los envíos a sus clientes? Me esperaba más de una empresa que tiene una excelente reputación de marca”, se pregunta.

Consumidor Global ha preguntado a Nike si tenía conocimiento de estas incidencias y si tiene algo qué decir por confiar y trabajar con una empresa que acumula tantos problemas. No obstante, la compañía se ha negado a manifestarse sobre este asunto.

Sin respuesta de Paack

De igual forma, esta redacción ha tratado de contactar con Paack para conocer su versión sobre esta oleada de envíos retrasados e incluso entregados a terceras personas, pero no ha habido respuesta por parte de la empresa al término de este reportaje.

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El ejemplo de Paack se suma a otros muchos casos de empresas de transporte que han generado problemas con los envíos de clientes. Amazon, por ejemplo, se desentendía de la forma de repartir de la empresa CTT, cuyos repartidores fueron captados dejando paquetes tirados en la calle. El de Paack es un nuevo caso más de empresas de transporte que dejan mucho que desear y que al final lo paga el cliente final. Y a las grandes compañías poco parece importarles seguir trabajando con ellas.