El pasotismo de Envialia: 15 días sin entregar el paquete y ni te cogen el teléfono

En tiempos de Tinder y de conquistas cibernéticas, hemos asumido que alguien nos puede dejar de responder de la noche a la mañana. Se esfuma como un fantasma. Sin embargo, esta actitud se convierte en un verdadero problema cuando lo realizan empresas de reparto. Es el caso de Envialia, acostumbrada a dejar compuestos y sin paquete a sus clientes.

Los afectados denuncian que llevan esperando los pedidos más de 15 días sin que Envialia dé señales de vida. No pueden contactar con la compañía ni a través del teléfono de atención al cliente, ni por correo electrónico. Una misión imposible que este medio también ha podido comprobar.

Semanas sin saber dónde está el pedido

“Llevo desde principios de abril esperando un pedido. A la semana, me abrieron una incidencia y me comenzaron a cambiar la fecha de entrega cada día. Intento ponerme en contacto con Envialia a través del número de atención al cliente y no me responden. Llevo esperando el paquete más de dos semanas y me es imposible hablar con ellos para que me ofrezcan una solución”, explica a este medio Gonzalo, uno de los afectados por los retrasos en los envíos de esta compañía.

No es el único caso. Alicia García también lleva más de 15 días esperando un pedido. “Compré unas botas y, supuestamente, me llegaban a los dos días. Llevo más de dos semanas esperando y aún no las he recibido. Dicen que no estaba en casa, pero yo no me he movido en todo este tiempo”, señala.

Teléfono de ‘desatención’ al cliente

Los afectados insisten en que es imposible ponerse en contacto con Envialia. “Me he gastado los datos de llamada. Es normal que tengan tan mala fama, ni informan ni atienden las llamadas”, cuenta Miriam Mediavilla. Algo que también ocurre con los mensajes de WhatsApp y con los correos electrónicos. “En el mensaje telefónico de atención al cliente te dicen que las reclamaciones se tienen que hacer por correo, pero luego tampoco te responden”, afirma Gonzalo.

Consumidor Global ha comprobado el funcionamiento de la atención al cliente de Envialia. Tras estar más de 20 minutos al teléfono, no hemos conseguido contactar con nadie de la empresa. Sin embargo, resulta curioso que a partir del tercer minuto de llamada crean una falsa esperanza en el usuario con tonos que alertan de que pronto será atendido sin que esto acabe sucediendo.

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Pérdida de pedidos

Otro de los principales problemas que denuncian los afectados es la capacidad de perder los paquetes por parte de Envialia. “La primera vez que me tenían que entregar el pedido lo perdieron. Conseguí contactar con ellos y me dijeron que me lo volverían a entregar y me lo han vuelto a perder”, relata Carmen Cano. En otros casos, como el de Ana, la situación es aún más seria. “Hice un pedido urgente. Ni a las 24 ni a las 30 horas había llegado el paquete y el seguimiento aparecía como entregado cuando no es verdad”.

Estos problemas no los tienen solamente con los pedidos que entregan en los domicilios particulares, también han extraviado paquetes que debían dejar en las tiendas. “Hice una compra a Springfield de una camiseta que pedí que me la dejasen en la tienda del centro comercial Madrid Sur. A la semana sin recibir noticias, me pasé por allí para preguntar. El dependiente me dijo que estaba en otra tienda y que llamase a atención al cliente de SPF. Al contactar con la empresa me explicaron que el paquete se había perdido, me pidieron perdón y me devolvieron el dinero además de darme un cheque-regalo”, detalla Alicia.

A la cola en el ranking

Todos estos problemas sitúan a Envialia a la cola del ranking de empresas de paquetería. Según los datos publicados por la CNMC, esta compañía de reparto ocupaba la décimo cuarta posición de un total de 20 empresas analizadas en 2020.

Esta situación también repercute en la imagen de las empresas que trabajan con Envialia. Algunas de las compañías son Tendam, Ikea o Sportvillage. En el caso de la tienda de ropa y la de deporte, cuando un usuario contacta con ellos por una incidencia de este tipo, se ven obligadas a solucionar el problema cancelando ese envío y devolviendo el dinero o tratando de hablar con Envialia.