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Por fin vas a descubrir para qué sirven los agujeritos de la tapa de los bolis
Su función no es estética y tampoco tiene que ver con la presión de la tinta, sino que es una cuestión de seguridad
El bolígrafo BIC es uno de esos objetos clásicos que no faltan en cualquier escuela, despacho u oficina: barato, ligero, eficiente y duradero, permite escribir de forma fácil y fluida. Creado en 1950, la marca defiende que BIC democratizó el arte de escribir y le dio a cada persona el poder de expresarse a su manera. A pesar de que su diseño es sencillo, oculta algunos secretos, como el pequeño agujero de la tapa.
Según desvela la propia empresa en su página web, el motivo por el que algunos bolígrafos tienen un orificio en la tapa no tiene que ver con la estética ni con el funcionamiento del utensilio, sino que sirve para evitar que la tapa obstruya completamente las vías respiratorias en caso de que una persona se la trague de forma accidental. Es decir, que esa minúscula abertura evita ahogamientos. De hecho, así lo exigen las normas internacionales, excepto en los casos en que la tapa se considera demasiado grande para representar un peligro de asfixia.
Cuándo se inventó el orificio de la tapa del boli
Así lo ha explicado también la cuenta de Instagram Zack Films. Tras la publicación de su vídeo, muchos de sus seguidores han mostrado su perplejidad, reconociendo que no tenían ni idea de para qué servía este orificio. Otros han explicado que sí conocían su función, pero que los primeros bolígrafos que ellos compraron no tenían ninguna abertura. Esto se debe a que se implementaron en la década de los 90, y en el diseño original, la tapa estaba completamente cubierta.
En el apartado de comentarios, otro usuario comenta que él es médico, y que ha comprobado la eficacia de la abertura: años atrás tuvo a un paciente al que, afortunadamente, le pudieron retirar la tapa que se había tragado.
Un instrumento "muy sofisticado"
En su web, BIC defiende que el modelo Cristal "parece extremadamente sencillo, pero en realidad es un instrumento de escritura muy sofisticado. Desde sus inicios, hace 70 años, no se ha hecho ninguna concesión y no se ha dejado nada al azar para garantizar que los consumidores reciban un bolígrafo de alto rendimiento y fiable", explican.
De hecho, según el fabricante, se realizan más de 70 controles a lo largo del proceso de fabricación para garantizar "esta excelente calidad".
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