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Nextdoor, un ‘Wallapop’ de barrio en el que compartir ofertas y servicios entre vecinos
Esta app fomenta el comercio de proximidad y las relaciones sociales entre residentes de una misma zona
La plaza del barrio ha sido siempre ese punto social de referencia para las civilizaciones a lo largo de la historia. Ya en la Antigua Grecia y en la Roma clásica, el ágora o el foro se consideraban centro neurálgico de la vida social en el que se daban todo tipo de actividades comerciales, económicas, políticas o administrativas. La plataforma Nextdoor pretende mantener esa idea, pero adaptada a los nuevos tiempos y con el papel de la tecnología en las relaciones sociales actuales.
A través de un portal en el que participan usuarios, comercios locales y asociaciones, Nextdoor aspira a ser una especie de “plaza de barrio virtual” en la que entablar relaciones y compartir recomendaciones con las personas que mejor conocen una zona, sus vecinos.
Una plaza de barrio virtual
Katherine Villegas, city manager de Nextdoor en Madrid, habla de utilizar a los vecinos como “fuente de información y ayuda” en el día a día. “Es una plataforma con la que se permite conectar de forma online y en la vida real y revivir la idea de que en el barrio podías conseguir todo lo que necesitabas”, explica Villegas a Consumidor Global.
Una de las principales funcionalidades de Nextdoor es la compra venta de artículos de segunda mano entre vecinos, una especie de Wallapop de barrio. “Cualquier cosa que busques, probablemente esté en tu zona y esta es una forma de ayudar a encontrarlo”, señala la responsable de la plataforma.
Fomentar el comercio de proximidad
Otra de las patas que nutre a Nextdoor son los comercios locales y de proximidad, convirtiéndose en un escaparate para “dar visibilidad” a los negocios más cercanos. Para ello existe un apartado de recomendaciones con preguntas y respuestas, estilo foro, donde los propios vecinos se hablan y se aconsejan entre ellos sobre ideas y negocios en los que encontrar los mejores precios.
“También hemos lanzado un proyecto de ahorro por el que invitamos a los vecinos a que cuenten y compartan sus mejores ideas para ahorrar con el resto de usuarios”, añade Villegas. Además, participan “expertos” sobre diversos temas como ahorro energético con vídeos y explicaciones que aportan un valor pedagógico a la plataforma.
Grupos temáticos
Ana Pardo es vecina del barrio de Comillas en Madrid y usuaria de Nextdoor desde 2021. “Me recomendó la plataforma un amigo y desde entonces soy bastante activa en ella”, cuenta a este medio. “Es muy útil para localizar productos, comprar y vender, buscar a alguien de carpintería y trabajos del hogar y también para hacer quedadas con gente”, señala.
“No es Tinder”, aclara, pero “se puede usar para quedar con gente”. En su barrio existen varios grupos enfocados en diferentes temáticas como mascotas o yoga. Si hay algo que mejoraría esta vecina de la app es la “moderación” de las personas que pueden participar.
Un tablón de anuncios
Y es que como se puede leer en varias reseñas de Google, el portal se puede convertir en un tablón de anuncios más. “La idea es preciosa, pero la ejecución deja mucho que desear. Hace falta moderación seria porque veo a mucha gente proponiendo actividades que constituyen delito como la venta de alimentos cocinados sin control sanitario”, escribe Lola G.
Para Amelia Sánchez es una “gran iniciativa”, pero critica que haya mucha gente que sólo la usa para anunciar su negocio, buscar trabajo o alojamiento. “Bastantes de estas personas llenan de spam grupos que no tienen nada que ver con ninguna de estas cosas, me gustaría que Nextdoor controlara más eso”, remarca.
Presencia en más de 3.600 barrios
Ana Pardo, vecina y usuaria de Nextdoor, cuenta a Consumidor Global su papel de moderadora en la plataforma. “Como en todos sitios, siempre se puede colar alguien que no es educado o que no está al tanto de las normativas, por ejemplo, de la ley de bienestar animal en el grupo de mascotas”, señala.
En cuanto a datos y cifras de Nextdoor, la city manager en Madrid, Katherine Villegas, apunta que en la actualidad se encuentra en 12 países. En el caso de España hay más de 3.600 barrios registrados en todo el país, incluidas las islas, aunque tiene más utilidad en las grandes capitales como Madrid, Barcelona, Valencia o Bilbao.
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