Más de la mitad de las peluquerías, salones de estética y barberías españolas se quedan sin vacaciones este verano, ahogadas por la inflación actual. En concreto, el 59,3 % mantendrán abierto su local durante todo agosto, y sólo cuatro de cada diez, un 40,6 %, cerrarán algunos días este mes, de acuerdo con el Estudio sobre las perspectivas de verano y el impacto del incremento de los costes y la inflación en el sector realizado por la Alianza Empresarial por la Bajada del IVA a la Imagen Personal.
El incremento de los costes de producción en estos establecimientos junto con el retroceso de la actividad del sector asociada a la disminución en número y asistentes de las celebraciones sociales, bodas, bautizos etc., y a las fiestas patronales del verano, hacen que la mayoría de las pymes de la imagen personal vayan a mantener abiertos sus locales durante el presente mes de agosto.
No recuperan cifras
Otro de los datos que destaca de este estudio es la evidencia de que siguen sin haberse recuperado las cifras prepandemia de servicios asociados a la celebración de eventos sociales como bodas, bautizos y comuniones.
En este sentido para las más de 1.200 pymes encuestadas solo se ha recuperado el 18,8 % de la actividad relacionada con estos servicios que juegan un papel tan importante en la facturación de la temporada.
Incremento de los costes
Si bien las fiestas populares que sí se están recuperando este verano puede significar un pequeño incremento de esta actividad tan necesaria para las pymes y autónomos de este sector.
El incremento de los costes de energía, personal, cotizaciones de autónomos y aumento de los costes de los productos utilizados en los servicios de peluquería y estética significa que estos establecimientos han sufrido un incremento de sus costes del 27,2 % en los últimos meses lo que supone un mazazo para la productividad de un sector que apenas ha recuperado aún el 79,8 % de la actividad que desarrollaba antes de la pandemia y con unos márgenes de beneficios inferiores al 10 %, y una facturación comparada con la de 2019, que ha retrocedido un 20,2 %.