8.000 metros cuadrados y una instalaciones de primer nivel es de lo que presume Metropolitan. Se trata de una cadena de gimnasios que cuenta con centros por toda España, aunque este artículo se centra en uno de Barcelona ubicado en el barrio de la Sagrada Familia. En su página web deja ver todos sus encantos: spa, sala de máquinas, piscina, centro de belleza y hasta un restaurante.
Un espacio por el que los usuarios pagan una cuota mensual básica de 106 euros al mes. Nada barato y una cifra lejana a la de cualquier low-cost. Está claro que el club es para bolsillos pudientes pero no por ello se libra de las críticas. Lleva meses acumulando comentarios sobre subidas de cuotas sin previo aviso y unas instalaciones que van a peor.
Subidas de precios por sorpresas
Lucía es una clienta de Metropolitan. Puntúa en Google con una sola estrella el centro barcelonés. ¿El motivo? "Suben la cuota sin previo aviso, repetidas veces en un año", asegura. Detalla que en solo dos meses aumentó la cuota de pareja 25 euros.
Esos incrementos estarían destinados a las mejoras de las instalaciones, según explica la usuaria. Una justificación que no convence ni a ella ni a otros clientes. "El mantenimiento e instalaciones cada vez son peores y más antiguas, no renuevan nada y, cuando hay máquinas, ascensores u otra instalación averiada, tardan la vida en solucionar los problemas", confiesa Victor B.
"No vale lo que pagas"
Chema I. es un cliente que lleva once años como socio en el club barcelonés. Él también afirma que su mensualidad la suben repetidas veces al año y "sin previo aviso". Algo que le irrita, teniendo en cuenta que "hay cosas que no funcionan, como por ejemplo la ducha bitérmica del spa, que lleva 4 MESES sin funcionar".
Es por ello que este usuario prefiere no continuar como cliente. Además, añade: "Es un gimnasio que YA NO RECOMIENDO, ya que no vale lo que pagas".
Sin dar explicaciones
Etienne M. también pone el foco en la subida de cuotas por sorpresa. Cuando se percató de ello, decidió pedir explicaciones a Metropolitan y la respuesta del club fue tajante: "Tenemos derecho a no decírselo a los miembros". Es la justificación que asegura haber recibido por parte del centro fitness.
Laura Sierra, abogada de Legálitas, explica a este medio que no es legal subir las cuotas sin previo aviso. Ahora bien, puede ser que el contrato incluya una cláusula sobre el incremento de precios. De ser así, puede considerarse una cláusula abusiva. En ambos supuestos, los afectados pueden reclamar.
Falta de información
Cuando un usuario entra por primera vez en la web de Metropolitan Sagrada Familia tiene la opción de darse de alta online. Un proceso en el que se abre un desplegable con todas las cuotas disponibles.
En ningún caso se informa en este apartado de que el gimnasio se reserva el derecho a incrementar los importes fijados. Es posible que, tal y como subraya Laura Sierra, se incluya una cláusula en el contrato. Pero, el problema es que antes de apuntarse, al menos de forma online, el cliente no es conocedor de ello.
Multa de 27.000 euros
No es la primera vez que Metropolitan irrita a sus clientes. La cadena ha sido multada con 27.000 euros después de instalar un sistema de huella digital para acceder a sus instalaciones. Fue en un club ubicado en Santander donde una clienta decidió no compartir sus datos biométricos.
A la afectada le pareció excesivo solicitar este tipo de información para entrar en el gimnasio. El centró la expulsó y ella denunció a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) lo que estaba ocurriendo. Finalmente, esta entidad falló a su favor y a la compañía fitness le toca pagar 27.000 euros.
Metropolitan mira hacia otro lado
Consumidor Global se ha puesto en contacto con Metropolitan para saber por qué se suben las cuotas sin previo aviso en el centro de Sagrada Familia. De momento, guardan silencio. Tampoco se pronuncian sobre el estado de sus instalaciones, unos espacios que los testimonios recogidos en este artículo afirman no estar en perfectas condiciones.
Teniendo en cuenta que la cuota básica son 106 euros al mes, parece lógico que los clientes exijan un gimnasio en buenas condiciones. "Tienen muchas cosas que resolver, tienen dinero por exceso con las cuotas pero se producen pocos movimientos en los mantenimientos. Cambios y reformas YA", exige Victor B.