La lavadora es uno de los electrodomésticos que más quebraderos de cabeza da a los consumidores: por tragarse calcetines de vez en cuando, por su consumo y por lo difícil que resulta repararlas. Ahora bien, hay un secreto que puede ayudar a lavar la ropa y a mantener en buen estado el aparato: meter una esponja en la misma.
La esponja puede comprarse en cualquier supermercado, y puede ser una totalmente normal. Lo único que hay que tener en cuenta es que no debe ser lisa. La esponja es capaz de atraer el pelo que haya en las prendas proveniente de las mascotas que vivan en casa y que se quedan en jerséis, camisas o pantalones.
Mantenimiento de la lavadora
Por otra parte, también hay quienes defienden que introducir tres bolas de papel de aluminio del tamaño de la mano puede evitar la electrificación de las prendas en la lavadora. Esto puede impedir que la ropa se dañe. En cualquier caso, también es importante limpiar la propia lavadora de forma periódica. Para hacerlo hay que seleccionar un programa corto e introducir bicarbonato en el bombo.
En cambio, si lo que se busca es higienizar la ropa, se puede optar por el percarbonato sódico, un producto inofensivo para la mayoría de tejidos, salvo para el lino, la seda o la lana.