Una de cada diez casas de nueva construcción ya se hace sin cocina en Estados Unidos. En España, un 95 % de los consumidores incluyen platos preparados en su lista de la compra. Incluso para comidas y cenas tan señaladas como las de Navidad, uno de cada tres españoles tiene la intención de comprar en la sección listo para llevar de los supermercados para no tener que cocinar durante las fiestas, según un informe de la Aecoc.
“Salgo de casa a las siete de la mañana y no vuelvo hasta pasadas las ocho. Si me pongo a cocinar, ¿cuándo tengo tiempo para mí?”, explica un joven, en la puerta de un Mercadona, con un plato de fideuá (4,75 euros) en la mano. Los platos preparados de los supermercados “son una tendencia que se está acelerando”, expone el fundador de Con Gusto Consulting, Manel Morillo, quien explica que lineales de comida preparada no paran de crecer y que todos los súpers tienen una sección listo para llevar y la están ampliando. Los mercaurantes “están ganando mucha cuota de mercado y son la principal competencia de Glovo, Just Eat y de los restaurantes que trabajan con delivery”, añade el experto en restauración.
Mercadona y Lidl versus Glovo y Just Eat
En cifras, el consumo de comida preparada de los supermercados alcanzó las 654.614 toneladas en 2021, lo que supone un incremento del 10,5 % en el volumen de ventas respecto a 2019. "Es un mercado en el que todos quieren entrar porque tener marcas de restauración en el lineal o en espacios del supermercado atrae a nuevos clientes y permite a la cadena expandirse hacia nuevas categorías", señala la directora del área de restauración de la cadena británica Sainsbury’s.
En el otro lado de la moneda, el mercado del delivery online en España se desacelera en 2022, donde cerrará con unos ingresos de 1.120 millones de euros en pedidos --un 7 % menos que en 2021, según las previsiones de Statista, avanzadas por Patrik Bergareche, director general de Just Eat en nuestro país--. El retroceso es todavía mayor si la comparativa se hace con 2020, cuando el sector del delivery alcanzó los 1.770 millones de euros en facturación.
El precio marca la diferencia
La palanca que mueve el negocio de los platos preparados en el supermercado y la del sector delivery es la misma: los españoles han abandonado el hábito de cocinar. “La diferencia es que la economía a escala de los supermercados les permite ofrecer un precio realmente competitivo y los restaurantes no pueden”, explica Morillo.
En la sección Listo para comer de Mercadona los platos preparados oscilan entre 2,25 y 4,75 euros; los de Lidl oscilan entre 1,69 y 5,99 euros; y los de Carrefour van de los 2,70 a los 7,50 euros. Unos precios que están a años luz de los que pueden ofrecer las tres principales empresas de delivery en España --Just Eat, Glovo y Uber Eats--, cuyo tique medio es de 22,5 euros. La inflación y la incertidumbre imperante hacen que los españoles se vean obligados a reducir el gasto, y, si la crisis se acrecienta, “desde luego que el delivery bajará y pasará a ser de consumo más ocasional, mientras que los mercaurantes crecerán todavía más”, valora el experto.
Los más vendidos
“Los platos que más éxito tienen son la paella (4,50 euros), las lentejas (3,50 euros) también salen mucho ahora con el frío, las croquetas (50 céntimos la unidad) y la tortilla de patatas está buenísima”, explica una dependienta de Mercadona sobre la sección Listo para comer, que cuenta con 35 referencias y está disponible en 824 establecimientos de la cadena de supermercados valenciana. Desde este año, Mercadona también ofrece la opción de libre servicio --una especie de bufé libre-- dentro de la sección Listo para comer.
En Lidl, por ejemplo, también triunfan las croquetas (3,29 euros), la paella (2,99 euros) y la lasaña a la boloñesa (5,99 euros). Aunque la sección de platos preparados --cuentan con 14 referencias-- es bastante más reducida que la de Mercadona o que La cocina de Carrefour. Todos los supermercados ofrecen hamburguesas de ternera a precios realmente competitivos, mientras que una Burger de Vicio puede llegar a costar la friolera de 15 euros.
O eres McDonald’s, o di adiós al delivery
El incremento de la demanda de platos preparados afecta, principalmente, “a la masa media de los restaurantes: aquellos que carecen de un valor añadido o de una marca potente. Los mercaurantes se van a comer ese consumo, ese pedido”, explica Morillo.
Según el experto de Con Gusto Consulting, se producirá una selección natural y el servicio delivery crecerá en las grandes cadenas, como McDonald’s o KFC, en aquellos restaurantes que ofrezcan un producto específico y diferenciado, y en los que ofrezcan precios realmente competitivos.