¿De qué disfrazarse? Esa es la cuestión. Cada año la misma duda. Es un día laborable de mediados de octubre, a media mañana, y en la inmensa tienda de disfraces Menkes, ubicada en la Gran Vía de Barcelona, ya hay numerosos clientes en busca del traje, la máscara o el maquillaje perfectos para celebrar Halloween.
La extensa variedad del catálogo de disfraces y complementos de Menkes no ayuda a tomar una decisión. “En Carnaval, cualquier cosa vale. Halloween es más específico”, apunta Isabel Carvajal, directora de esta casa especializada en vestuario que también cuenta con tienda online y locales en Madrid, Bilbao, Sevilla y Valencia.
Disfraces de alquiler
Con la importancia que le dan los jóvenes (y no tan jóvenes) a las redes sociales, “cada vez tira más el disfraz de alquiler por un tema de calidad”, reflexiona Carvajal mientras muestra la trastienda, que está repleta de disfraces reservados para la ocasión.
Alquilar un disfraz para Halloween durante tres días tiene un coste de entre 55 y 100 euros, y, “si lo devuelves un día tarde, tampoco te cobramos un extra”, añade la directora de Menkes Barcelona.
Halloween 2023
A falta de otros estrenos o nuevas series del tipo El juego del calamar, las máscaras de Saw -por Saw X (2023)- o las del payaso de It, y disfraces clásicos de momias, brujas, dráculas y de personajes como el Joker o la Familia Addams, “arrasarán seguro”.
El disfraz completo de El cuento de la criada, por ejemplo, cuesta 40 euros, una máscara de látex del muñeco diabólico Chucky (35) y vestirse de diablo de lujo sale por 65 euros. Y también hay trajes de superhéroes de Marvel (entre 25 y 70 euros) y opciones mucho más económicas, como las sudaderas y atuendos de El juego del calamar (entre 15 y 20 euros) o el mono con capucha de La casa de papel (45 euros), prendas que tienen un 50% de descuento.
Un buen maquillaje y otros complementos
“También tenemos complementos más baratos y maquillaje profesional para la gente joven. El maquillaje blanco y la sangre son el 50% del disfraz”, explica Carvajal sobre los diferentes atuendos y efectos para Halloween, que van desde dientes de vampiro (0,50), una careta de Scream (1,35), cápsulas de sangre (1,90), narices de bruja (2), látex líquido para zombie (5), calabazas portacaramelos (5,99) o el kit de maquillaje de los muertos (8,5 euros).
Hace medio siglo, “estábamos solos y teníamos unas colas que daban la vuelta a la manzana”, recuerda Carvajal, quien asegura que ahora hay mucha más competencia, sobre todo en tema precios (Party Fiesta, Flying Tiger, etcétera), pero, en cuanto a calidad, “seguimos siendo únicos”.