La inflación en España escaló en marzo hasta el 9,8 % respecto al mismo mes del año anterior, la más alta desde 1985. Así lo reflejan los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que indican una subida de dos puntos sobre la tasa de febrero (7,6 %).
Los datos correspondientes al índice de precios de consumo (IPC) reflejan que este gran aumento se debe a las subidas generalizadas en la mayoría de componentes, sobre todo de la electricidad, cuyos precios han alcanzado récords en España; los carburantes y combustibles, encarecidos tras la invasión de Rusia en Ucrania; y los alimentos y bebidas no alcohólicas.
Trece meses de subidas de precio
El precio medio de los carburantes supera los 1,80 euros el litro, con un incremento del 23,5 % en el gasóleo y del 13 % en la gasolina respecto a la última semana de febrero. Por su parte, el precio medio de la electricidad este mes en el mercado mayorista es de 284,77 euros megavatio/hora, un valor que multiplica por seis el de marzo de 2021.
Los precios de consumo suman trece meses al alza en España, desde marzo de 2021, una senda solo interrumpida en enero, cuando la inflación se moderó 4 décimas, al 6,1 % interanual. Respecto al mes anterior, los precios registran en marzo una subida del 3 %, la mayor en 44 años, desde agosto de 1977.
La inflación, según el Gobierno, se debe a la guerra
La inflación subyacente, que no incluye ni alimentos frescos ni energía, registró un repunte de cuatro décimas en marzo, hasta colocarse en el 3,4 %, la más alta desde septiembre de 2008.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha destacado que este repunte "en un 73 %" es atribuible al impacto de la guerra en Ucrania. El Gobierno confía en que el plan de respuesta aprobado este martes por su Gobierno permitirá "doblegar la curva (de la inflación) y estabilizar el coste de la vida".