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Maison Carree: la inmobiliaria se niega a enseñar un piso a una clienta por dejar una mala crítica
La empresa discrimina a esta usuaria después de una mala experiencia con uno de los agentes inmobiliarios: "Lo sentimos mucho pero dejaste una mala reseña en Google"
Desde que se inventó la posibilidad de dejar reseñas en Google, las empresas van con pies de plomo. Tener una buena puntuación y unas críticas maravillosas es lo que todas desean. Sin embargo, es imposible contentar a todo el mundo. Por eso, siempre hay algunos usuarios que no han quedado satisfechos con los servicios prestados y así lo hacen constar en la red.
Maison Carree parece no tomarse muy bien los comentarios negativos. La inmobiliaria tiene sus oficinas en Barcelona. En la capital catalana se encarga de gestionar ventas y alquileres de inmuebles por diferentes zonas y municipios. Pese a su buena puntuación en Google, a la empresa no le faltan las malas críticas.
Una mala experiencia que te condena
Bea C. es una usuaria que ha recurrido en varias ocasiones a Maison Carree. Según relata la internauta a Consumidor Global, ha estado en contacto con la inmobiliaria para la visita de dos pisos. Sin embargo, con uno de ellos tuvo una mala experiencia. No le gustó el trato recibido por parte de uno de los agentes inmobiliarios.
La internauta asegura a este medio que se sintió un poco presionada cuando llegó el momento de cerrar el contrato de alquiler. “Traté con Dxxxxx y no me gustó nada”, reseñó en Google Bea C. hace cuatro meses. Un comentario que la ha condenado a no poder seguir tratando con la compañía.
El email delatador
Bea C. cuenta a este medio que estaba interesada en ver un piso en Sant Gervasi, un conocido barrio de Barcelona. Tras ponerse en contacto con la empresa para concretar una cita, se topó con la negativa. “Lo sentimos mucho pero en esta ocasión no vamos a proceder a la visita”, indicó Maison Carree en un correo electrónico.
¿El motivo? La empresa alega que tras las dos visitas anteriores, la usuaria ha dejado una mala reseña en Google: “Después de las dos últimas visitas en este mismo edificio en las cuales te tratamos perfectamente, dejaste una mala reseña en Google sin sentido”. La internauta se quedó sorprendida ante tal argumento (de hecho, niega que hiciese dos visitas al mismo edificio). Nunca antes se había visto en una situación tan siquiera similar. “Espero que puedas encontrar una vivienda para ti pronto”, zanjó Maison Carree.
¿Se puede rechazar a un cliente?
Ninguna empresa está obligada a tratar con una persona. Así lo explica a Consumidor Global Arantxa Goenaga, abogada y socia de Círculo Legal Barcelona. La experta considera que “lo mismo que el cliente escoge dónde quiere ir, la empresa puede escoger a quién vender”.
Tomando como referencia esta información, todo parece indicar que Maison Carree puede rechazar a sus clientes. “Otra cuestión es que la forma de realizarlo se pueda considerar correcta o poco afortunada”. Una forma de proceder que, a juicio de Goenaga, es probable que no conste expresamente en la política de empresa.
¿Persona non grata?
Nada le hizo presagiar a Bea C. que la inmobiliaria la sacaría de su lista de clientes. De hecho, cuando dejó la reseña en Google, la empresa le respondió con unas palabras amables: “Agradecemos tu comentario y lo lamentamos. Si necesitas ayuda con algún otro tema inmobiliario contacta con nosotros y otro agente se encargará de tu caso sin problema”, indicó. Ante el rechazo de Maison Carree, lo único que puede hacer la afectada es acudir al Ministerio de Consumo para exponer el caso.
Aún así, “no pueden obligar a una persona a trabajar con otra”, recalca la abogada. “Otra cosa también será lo que opine el propietario”, expone la experta. Es el dueño del piso a quien este hecho puede afectar puesto que se queda sin un interesado en su vivienda. “Si lo denunciase no le veo mucho recorrido”, zanja Goenaga. De lo que no hay duda es que, a veces, las malas críticas salen caras. Maison Carree prefiere perder a una clienta por un solo comentario negativo. Una forma de proceder que dejó atónita a Bea C.
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