JustFab es una tienda americana de moda online que se define como una marca inclusiva con diseños para todas las tallas y siluetas. El calzado es su gran baza, y comercializa casi de todo: zapatos de tacón para ocasiones especiales, botines para el día a día, deportivas, botas con un diseño que recuerda a las Dr. Martens… Uno de sus principales reclamos es que el primer par cuesta sólo 10 euros, pero esta oferta irresistible tiene truco: muchas clientas denuncian que, al hacer su pedido, aceptaron sin percatarse una suscripción mensual.
“Encuentra zapatos en tallas de la 36 a la 43 y ropa en tallas de la XS a la 3X. Queremos que te sientas cómoda y saques el máximo partido a tu estilo, por eso en tu showroom personalizado siempre encontrarás diseños que se adaptan a tu armario y a tu presupuesto”, dicen en su web. Más abajo, en una letra mucho más pequeña, advierten al comprador de que puede decidir suscribirse al programa VIP o saltar el mes “para evitar un cobro de 44,95 €. Los cobros se convierten en créditos VIP que pueden ser utilizados para comprar en cualquier momento. Para evitar el cobro, haz otra compra o entra en tu cuenta y haz clic en el botón 'saltar el mes' entre los días 1 y 5 de cada mes”.
Cobro de 40 euros “sin avisar”
“Me pedí unas deportivas junto con una amiga. Al tiempo me llegaron, y a final de mes me cobraron 40 euros directamente sin avisar”, cuenta Ainhoa Faricle a Consumidor Global. Esta clienta pensó que ese cargo no tenía nada que ver con el pedido que había hecho, sino que se trataba de un extra, así que pidió explicaciones. “Llamé directamente al departamento de atención al cliente, y me dijeron que yo había aceptado una cosa (que está casi oculta a la hora de comprar)”, describe.
“No me dieron ninguna solución porque yo les decía que me devolviesen el dinero y no querían. Volví a llamar y me dijeron que el dinero que se me había quitado era saldo que me podía gastar en la web”, expone Faricle. Sin embargo, no lo podía invertir libremente: debía escoger un producto cuyo precio fuera exactamente 39,99 euros.
Importe exacto
“No podía coger dos zapatos que sumasen 40 ni uno de 20 euros. Tenía que ser el importe exacto, y solo había dos pares de zapatos a ese coste en la web”, describe. Así, se vio obligada a pedirlos, y ahora tiene dos: los que adquirió “por voluntad propia” y los que le “obligaron” a pedir. Faricle cree que, en cuanto a la calidad del material, los zapatos “están bien”, pero cobrar una suscripción de esta manera subrepticia es “una estafa increíble”.
No es un caso aislado. “Yo me enteré de la estafa gracias a TikTok”, cuenta Sara Aparicio. “Básicamente venden la página como una web de zapatos baratos, pero lo que ocurre es que antes de comprar, aceptas ser parte de un club VIP sin darte demasiada cuenta, como si simplemente fuera que te van a llegar correos con las ofertas”, describe. Es decir, que el consumidor hace clic con el convencimiento de que se está dando de alta en una newsletter o algo por el estilo. “En ningún momento te informan de que los zapatos te salen tan baratos porque ya te van a cobrar 40€ al mes por pertenecer a ese club VIP”, denuncia Aparicio.
Decepción con la calidad del calzado
Así, tras realizar un pedido, ella llamó a JustFab e hizo “las preguntas adecuadas”; y la empresa contestó que, efectivamente, “me iban a cobrar esos 40€”. También le indicaron los pasos para cancelar esa suscripción “y por suerte la primera compra siguió siendo barata”, afirma. No obstante, no comparte la visión de Faricle sobre la calidad de los materiales.
“Los zapatos no cuestan ni siquiera el precio de la oferta”, argumenta. Con todo, reconoce la labor de la trabajadora de atención al cliente que le atendió. “Entendió perfectamente que quisiera darme de baja por mucho que intentara que me quedara, imagino que tuvo más de una incidencia así, pero por lo que sé, siguen intentando estafar a la gente de esa manera”, añade.
Dificultades para cancelar la suscripción
El pasado diciembre, Marta Aranda denunció en redes sociales que JustFab le había hecho un cobro de 44,95 euros tras pedir unas botas con un descuento “que aparecía de forma natural” en la web. Además, conseguir cancelar la suscripción fue una odisea. “Finalmente, tras tener mucha paciencia e intentarlo muchas veces, incluso después de respuestas irrespetuosas y carentes totalmente de interés por echarme una mano, conseguí que una chica muy maja me devolviera el dinero. Aun así, reitero que no recomiendo a nadie comprar en esa app”, argumenta.
En redes sociales es sencillo encontrar críticas sobre este cobro. Existe incluso un grupo de Facebook con más de 1.000 clientes perjudicados en el que se comparten recomendaciones sobre cómo actuar para recuperar el dinero. Además, una usuaria creó una página de firmas en Change.org en la que alertaba de esta práctica que calificaba de “estafa”. Hoy suma más de 500 firmantes. Este medio ha contactado con JustFab para preguntar por estas incidencias y saber si, a su juicio, el aviso del cobro por la suscripción VIP aparece de forma explícita, pero al término de este reportaje no ha obtenido respuesta.