¿Quién quiere pedir cita en una sucursal de banco, coger un autobús y reunirse durante una hora con un gestor de americana gris y pelo engominado más gris todavía, si es posible descargarse una app en pocos segundos, desde cualquier parte del globo, e invertir la cantidad que uno quiera en el producto de moda sin tener que hablar con un desconocido?
Los bancos tradicionales “o se digitalizan o mueren”, apunta Luz Parrondo, directora del postgrado en blockchain de la Universidad Pompeu Fabra Barcelona School of Management, quien explica que las FinTech --también llamadas neobancos-- se caracterizan por simplificarlo todo al tener una operativa y respuesta mucho más rápida. Se trata de empresas verticales, derivadas de un banco, que funcionan a través de una aplicación y ofrecen productos y servicios basados en las nuevas tecnologías. Vivid Money, una plataforma asociada a Solarisbank AG con presencia en Alemania, España, Francia e Italia, permite invertir en metales preciosos fraccionarios, criptomonedas, acciones y fondos de inversión (ETF).
¿Cómo invertir 0,01 euros en oro?
El Pocket de metales preciosos de Vivid ofrece la posibilidad de invertir en oro y plata “con absoluta liquidez y sin costes de almacenamiento”, expone a Consumidor Global el cofundador de Vivid, Alexander Emeshev. A diferencia de lo que ocurre cuando se compran metales físicos y se tiene que pagar la onza o el gramo de oro, este nuevo servicio de la empresa de tecnología financiera permite realizar inversiones en metales preciosos fraccionarios desde tan solo 0,01 euros, y ahorrar en el Wallet.
Este tipo de inversiones “son una alternativa total” a la compra de lingotes físicos, apunta Parrondo. “Los productos bancarios también se convertirán en commodities --bienes tangibles que se pueden comercializar--. Es una forma de democratizar las inversiones porque todo el mundo puede acceder a través de una app. Es menos farragoso y más accesible”, explica esta experta, quien asegura que hay chavales de instituto que hacen este tipo de inversiones y compran bitcoins.
Aspectos a mejorar
Vivid, con sede en Berlín, ofrece la posibilidad de invertir las 24 horas al día de lunes a viernes, pero no durante los fines de semana. “Estamos trabajando para tratar de ampliar el horario de inversión a los siete días de la semana, lo que cambiará por completo las reglas del juego", asegura Emeshev.
Desde la compañía también explican su intención de vincular sus tarjetas físicas o virtuales con el llamado Pocket de metales preciosos para que los clientes puedan pagar sus compras con oro o plata, cosa que todavía no pueden hacer. Al mismo tiempo, el catálogo de metales preciosos se reduce a los citados anteriormente, pero Emeshev asegura que pronto introducirán el platino y el paladio.
Riesgos y ventajas
“No cobramos a nuestros clientes ninguna tasa de almacenamiento ni comisiones adicionales por la ganancia de capital”, informa el cofundador de Vivid, que sí aplica un recargo fijo a las transacciones --de un 1% para los clientes con la tarifa estándar, y del 0,5% para los Vivid Prime, cuya tarifa tiene un coste de 9,90 euros mensuales--. Mientras en un banco tradicional pedir cualquier gestión comporta un proceso de firma y de análisis de riesgo que es lento, en estas plataformas hay un algoritmo que evalúa tu riesgo y en minutos tienes una respuesta.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, y es que en este tipo de neobancos, “al estar menos regulados y ofrecer unos productos más dudosos, tienes acceso a unas situaciones de riesgo que antes no tenías”, recalca Parrondo. Además, esta experta explica que, mientras la gente mayor tiene ciertas reticencias a la hora de realizar inversiones así, “los jóvenes sí se sienten cómodos y tienen, por lo general, una percepción del peligro menor. Y esto comporta un riesgo”.
¿Quién invierte céntimos en oro y criptomonedas?
El nicho de mercado de Vivid es un público nativo digital y también muchos inversores primerizos que no están exprimiendo todo su potencial a nivel financiero, aseguran desde la empresa, que se niega a proporcionar el número de usuarios que tiene su aplicación.
Los que más lo utilizan “son los jóvenes, los techies y gente a la que le motiva el riesgo y está abierta a que instituciones no convencionales les vendan cosas”, apunta Parrondo, quien opina que los padres también tienen mucho trabajo a la hora de educar, controlar y poner límites a sus hijos para que no entren aplicaciones.
Los menores también se cuelan
Para acceder han de ser mayores de edad, “pero los menores buscan la fórmula y acceden porque todavía están bastante desreguladas y la verificación de edad no suele ser tan eficiente como debería”, alerta Parrondo, quien asegura que invertir un céntimo en oro es tan fácil que está al alcance de cualquiera. Con internet, “nuestros hijos están expuestos al riesgo como nunca antes lo habían estado, y con estas inversiones sucede lo mismo: a más opciones, más riesgos. Pero la balanza se decanta a favor de la tecnología. Se trata de ser prudente e informarse, y si caes en una estafa, aprender de ello”, sentencia la experta.
En el caso de Vivid, la empresa asegura que controla de forma minuciosa el acceso a sus servicios. "Para poder invertir en metales preciosos es imprescindible tener abierta una cuenta bancaria en Vivid a la que solo pueden acceder personas mayores de edad mediante una exhaustiva verificación de identidad --envío de fotografías del DNI o pasaporte y un reconocimiento facial posterior--", apuntan desde la plataforma. Una vez hecha la verificación, al solicitar la apertura de un Pocket de metales preciosos, Vivid envía las condiciones del servicio, se exponen sus riesgos y el usuario debe realizar un test de conocimientos previos.