La medicina anda en constante evolución hacia mejores tratamientos en efectividad y respuesta por parte de los pacientes. Uno de los campos que ha experimentado una revolución significativa es el tratamiento de las hernias discales. Estas dolorosas afecciones de la columna vertebral han afectado a millones de personas en todo el mundo, limitando su movilidad y calidad de vida.
Sin embargo, la innovación médica ha abierto nuevas puertas para el alivio del dolor y la recuperación de aquellos pacientes que padecen hernias discales. El doctor Ignacio Álvarez García de Quesada, jefe asociado del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid y responsable de la Unidad de Columna, explica a Consumidor Global las claves para entender esta patología y hacia dónde va la investigación para tratar esta afección tan común.
Qué es una hernia discal
Lo primero de todo es comprender en qué consiste una hernia discal. Tal y como señala el doctor Álvarez, el disco intervertebral está formado por dos estructuras: el anillo fibroso que es la parte dura y estructural que envuelve al núcleo pulposo, “la almohadilla”. “La hernia discal es el desplazamiento de parte de disco intervertebral (generalmente el núcleo pulposo) fuera de su lugar natural que es entre las vértebras pudiendo producir la compresión de estructuras nerviosas”, expone el especialista.
El principal motivo de su aparición es el desgaste de la estructura del disco, “aunque también se puede producir por un sobreesfuerzo o un traumatismo”, señala el doctor. Preguntado por los avances en el tratamiento de esta patología, el doctor Ignacio Álvarez destaca que “el mejor tratamiento es el conservador sin necesidad de cirugía, dado que en muchos casos mejora con tratamiento médico y rehabilitador”, sostiene.
Fomentar el autocuidado del paciente
Si se tiene en cuenta el punto de vista quirúrgico, la evolución ha sido intentar siempre técnicas cada vez menos invasivas. “Los avances han ido más en fomentar el autocuidado por parte del paciente, siendo cada vez más importante lo que el paciente haga que lo que le pueda hacer la fisioterapia”. En este sentido, el doctor recuerda que no existe un “tratamiento de masajes” para una hernia discal, sino que la rehabilitación ha de poner en forma la musculatura implicada en restaurar la actividad del paciente, por lo que “su colaboración es siempre imprescindible para notar mejoría”.
Otro de los aspectos a reseñar en el tratamiento de las hernias discales es la personalización del mismo. Lo primero que hay que tener en cuenta, señala el doctor, es la localización de la hernia, ya que no es lo mismo un tratamiento a nivel cervical que dorsal o lumbar. “Si bien hay varias terapias disponibles para cada patología, cada cirujano está más habituado a unas técnicas que a otras y le puede ofrecer distintos tratamientos. De ahí que, si solicita varias opiniones a distintos especialistas, le pueden ofrecer cirugías que puedan parecer diferentes, pero no por ello mal indicadas”, describe Álvarez García.
Cirugía endoscópica
Si hablamos de las técnicas menos invasivas, la cirugía endoscópica suele ser la principal. Consiste en retirar el fragmento discal que comprime el nervio con la ayuda de un endoscopio, con una o dos pequeñas incisiones de menos de 1 centímetro. No obstante, el doctor puntualiza que, “aunque sea menos invasiva, tiene las mismas complicaciones y resultado que una microdiscectomía (la cirugía con ayuda de u microscopio y una incisión de unos 3 centímetros)”.
En cuanto a los plazos de recuperación, el especialista recalca que cuanto menos invasiva es la cirugía, más se acortan los tiempos de recuperación. “En las cirugías de discectomía abiertas clásicas, se hablaba de una recuperación de al menos dos meses y se ha ido acortando hasta el plazo de 2 - 3 semanas con la endoscopia”, apunta.
Elegir bien al especialista
Finalmente, el doctor Álvarez García da algunos consejos a las personas que estén considerando opciones de tratamiento para una hernia discal. “Lo primero que debe saber el paciente es que tener una hernia discal no significa terminar en cirugía. Al revés. podemos decir que más del 90 % de las hernias discales va a mejorar con el tratamiento conservador”.
La cirugía solo debe plantearse si el dolor es intratable o existe compromiso neurológico, señala Álvarez. En cualquier caso, lo que se recomienda es consultar con los especialistas en cirugía de columna para abordar el mejor tratamiento. “Hay que elegir correctamente al especialista que después de la intervención le siga en la recuperación y haga el seguimiento, dado que en ocasiones puede precisar más tratamientos quirúrgicos”, señala.
Vida sana para prevenir las lesiones discales
En forma de conclusión, el jefe asociado del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid recomienda que lo más importante es “tener una buena información y que el especialista le explique al paciente el resultado esperado”. “Hay que huir de las falsas expectativas que a veces damos los médicos en general con las nuevas técnicas, dado que las complicaciones y resultados en el momento actual son similares a las técnicas clásicas. Eso sí, lo esperado es que tenga una recuperación más rápida”, defiende.
El doctor también se anima a lanzar las mejores recomendaciones para prevenir lesiones discales, que no son nada más y nada menos que vida sana, evitar el tabaco y el sobrepeso y hacer algo de ejercicio o deporte aeróbico. “Cuanto antes se empiece, mejor”, recalca.