La cerveza muy fría. Esta es la condición que no perdonan los amantes de las cañas. Las altas temperaturas del verano, las excursiones o simplemente un descuido pueden hacer que la bebida no esté a la temperatura deseada.
Sin embargo, existe un remedio casero para enfriar la cerveza de forma rápida. Una alternativa que funciona muy bien cuando alguien se olvida de guardarla en el frigorífico previamente.
Un truco para enfriar la cerveza
No hay por qué tomar la cerveza caliente cuando está recién comprada. En estos casos, existe una forma de conseguir enfriarla sin demasiadas complicaciones.
Solo hay que envolverla en papel de cocina. Una vez hecho esto, hay que dejarla en el congelador durante unos minutos. Pocos, con cuatro o cinco minutos basta. Y después solo queda disfrutar de ella bien fresquita.
Otras alternativas
En situaciones de emergencia, se puede recurrir al tradicional hielo y sal. Basta con sumergir un botellín en un bol lleno de agua junto a los ingredientes mencionados. Cuantas más botellas se introduzcan, más tiempo tardarán en enfriarse.
Otra opción que funciona muy bien en las excursiones es la nevera portátil. Esta casi nunca falla y suelen mantener bastante bien el frío del hielo. Unos trucos para la cerveza que funcionan muy bien en momentos puntuales.