El Hospital de Villalba, el centro con los tiempos más cortos en listas quirúrgicas y pruebas

El Hospital General de Villalba se ha vuelto a postular como el centro de la sanidad pública madrileña con los tiempos de espera más cortos durante el pasado mes de julio, tanto en intervenciones quirúrgicas como en pruebas diagnósticas. Los datos autonómicos del séptimo mes registran una bajada del número de pacientes en espera estructural, pero una subida en los tiempos de demora. Así pues, 72.066 madrileños se encontraban aguardando una operación el pasado julio, la cifra más baja desde enero de 2021 cuando se situó en 69.172 pacientes.

Sin embargo, el tiempo de espera para pasar por quirófano subió hasta los 71,60 días regresando a niveles de enero de este año cuando la demora era de 73,45. Con todo, la espera quirúrgica madrileña se encuentra por debajo de los 123 días de media que registra el conjunto del estado.

El de Villalba, con 15,04 de promedio, lidera el ranking de la sanidad pública de Madrid. Una persona que tenga que someterse a una operación de juanetes (la intervención no urgente con más demora estatal con 140) tiene que aguardar 14,25, según los últimos datos de julio. En el caso de una artroscopia de rodilla, el paciente puede ser operado en 12 en el de Villalba, mientras que la media nacional para esta cirugía es de 132.

El top 5 de los hospitales con mayor rapidez en las listas de espera quirúrgica lo configuran el Rey Juan Carlos, con 23,15 días; el Infanta Elena, con 26,56; la Fundación Jiménez Díaz, con 44,79; y el Fuenlabrada, con 44,84. En el extremo contrario, por encima de los tres meses de demora, se sitúan centros como el Getafe (97,65); el Torrejón (98,73); el Infanta Sofía (99,86); y, en último lugar, el Central de la Defensa Gómez Ulla, con 135,89 días.

Pruebas diagnósticas en 5 días

En el caso de la realización de pruebas diagnósticas y terapéuticas, julio registró una ligera bajada en el número de pacientes en espera estructural situándose en 165.251 personas, el dato más bajo desde marzo. No obstante, igual que con las LEQ, el tiempo de demora también se incrementó pasando de los 48,97 días de junio a los 58,28 de julio. Se trata del valor más alto desde septiembre de 2020 cuando la media era de 65,95 días de espera.

El Hospital General de Villalba lidera la clasificación de los centros más rápidos con 5,22 días de media. Le siguen el Rey Juan Carlos, con 6,74; la Fundación Jiménez Díaz, con 7,79; el Infanta Elena, con 10,14; y, finalmente, el Hospital Universitario de Torrejón, con 14,53 días. En el lado opuesto, un madrileño tiene que esperar tres meses para acceder a una prueba diagnóstica en hospitales como Central de la Defensa Gómez Ulla (con 89,11); el Infanta Sofía (91,51); el Sureste (92,91) o el Clínico San Carlos (107,81). Por consiguiente, existe una diferencia de más de 100 días entre realizar unas pruebas en el Hospital de Villalba o hacerlo en el Clínico San Carlos. La espera para una resonancia magnética, por ejemplo, pasa de ser de 5,76 en el primer centro a dispararse hasta los 122,55 en el hospital del distrito de Moncloa- Aravaca.

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El número de pacientes de las listas de espera para visitar al especialista aumentó en julio en 9.034 personas, situándose en 578.629.  Asimismo, el tiempo de espera también aumentó; de los 47,25 días de junio a los 57,09 días registrados en julio.

En esta ocasión, el hospital madrileño que maneja las demoras más cortas es el Rey Juan Carlos, con 3,99 días. Le siguen el de Villalba, con 4,61; la Fundación Jiménez Díaz, con 6,50; el Infanta Elena, con 11,05; y El Escorial, con 29,77 días. Las demoras se alargan más allá de los 70 en centros como el Henares, La Paz, Príncipe de Asturias o Severo Ochoa.