“Acabo de llevarme una incómoda sorpresa. En H&M ya no venden ropa de talla grande en tienda física. Al preguntar a los dependientes, me dicen que sí la tienen pero sólo en el canal online”, comienza a relatar Brigitte Morabito, quien manifiesta que la decisión tomada por la marca sueca le parece “discriminatoria” y desagradable”.
Joana Amengual se encontró en la misma tesitura hace unos días, cuando fue a un establecimiento de la empresa. “No vi nada de talla grande. H&M ya ni las vende, a no ser que sea online. Por mí se pueden ir todos a la quiebra. Al final a las gordas solo nos quedará Shein”, se resigna esta clienta ante la imposibilidad de comprar ropa de su talla en las tiendas físicas de la marca.
Cuál es la razón
Desde H&M reconocen esta práctica a Consumidor Global y subrayan que, pese a ello, están “orgullosos de poder ofrecer H&M+ , nuestro concepto de tallas grandes, a nuestras clientas”. Según explica la marca, la demanda de tallas grandes se desplazó hacia el canal online y desde 2020 está disponible exclusivamente online, “siguiendo la demanda de los clientes”.
“Es una cuestión de stock y de rotación”, destaca Raúl González, CEO de Ecodicta, una plataforma de moda circular. “En mi opinión, el primer paso es entender que las empresas de moda no son empresas de moda, sino empresas de logística –argumenta el experto–. El core de su negocio es la gestión de stocks y movimiento de stocks entre los distintos puntos de venta desde la fabricación para poder rotar siempre y tener colecciones nuevas”.
No hay “suficiente” demanda
González apunta que las tiendas físicas, que tienen un radio de kilómetros de personas que se acercan a ellas, no tienen “suficiente demanda de las tallas grandes a corto plazo para que les convenga tenerlas, teniendo en cuenta que necesitan que esas prendas se vendan rápido para poder traer nuevas colecciones”.
“Otra cuestión, además de la escasez de demanda en tienda física, es que las personas de tallas grandes no quieren ir a tienda por vergüenza, o temas estéticos, no les gusta probar ropa en público”, expone el experto. De hecho, el propio González confiesa que utiliza talla grande y que le cuesta encontrarla. “Aparte de que no me gusta probarme ropa porque no me gusta cómo me queda”, resalta.
¿Qué es una talla grande?
Los diseñadores y comerciantes denominan tallas grandes a todas aquellas que pasan de la 42. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad convino en 2007 que la ropa de talla grande es la que supera la 48. Sin embargo, cabe destacar que una talla en un establecimiento no mide lo mismo que en otro.
Según datos de la CECU, más del 77 % de la población declara no poder utilizar siempre la misma talla, una cifra que llega al 82 % en el caso de las mujeres. Además, casi la mitad de los usuarios tiene la impresión de que las tallas en los últimos años han tendido a hacerse más pequeñas. Sea como fuere, H&M prefiere que los usuarios de tallas grandes no vayan a sus tiendas.