Hay quienes acuden al gimnasio con ropa básica de Decathlon, quienes valoran por encima de todo la anchura y prefieren prendas holgadas a las camisetas ajustadísimas que marcan los músculos; y también quienes ni se molestan en encontrar unas zapatillas adecuadas y se plantan en las máquinas con unas Converse o unas Vans planas. Entre los que se dejan un buen dinero en el outfit figuran los fans de Gymshark, una marca británica que comercializa ropa especializada: unos leggings de mujer cuestan más de 60 dólares y una camiseta rebasa los 35.
Pero los precios no son el mayor problema, al menos para los consumidores españoles, a los que se les ha tendido una trampa: una página fraudulenta vende ropa haciéndose pasar por Gymshark. Carlos Gómez-Serranillo es un aficionado al gimnasio y a trabajar hipertrofia que tenía el ojo echado a Gymshark, que describe como la “marca premium” de la gente que practica culturismo. Además, cuenta a este medio, la firma ha ganado notoriedad porque la promocionan muchos creadores de contenido online. Así, Gómez-Serranillo entró en la web el pasado mes de enero para ver si había algo asequible de rebajas.
Primeros puestos en Google
Al teclear “Gymshark” en Google, relata este joven deportista, la primera página que aparece está en inglés; pero un poco más abajo el buscador muestra otra en castellano, Gymshark España. En concreto, su dominio es www.gymsharkespaña.com.es. Novedoso, pero verosímil. “Entonces piensas que quizá hayan sacado una tienda en España, para no tener que pagar en dólares o hacer el envío desde allí”, argumenta Gómez-Serranillo. Sin embargo, si se copia el dominio, aparece un título más extraño con caracteres más dudosos.
“La página parece fiable, está bien hecha. Y además la ropa es muy barata”, añade este cliente. Hoy, si un consumidor accede, encontrará camisetas por 16 euros, la mitad de lo que cuestan en la tienda británica. Gómez-Serranillo supuso que la diferencia se justificaba porque serían descuentos de enero. No obstante, reconoce que, si se mira con detalle, se advierte que la página tiene ciertos errores: los conjuntos (camiseta y pantalón) no aparecen de forma suficientemente intuitiva, el menú no es exactamente igual y la apariencia no es del todo pulcra, con un logo más grande que el de la web oficial. Pero es una copia lograda.
Una falsa oferta
A la hora de pagar es necesario registrarse en la web (no se puede continuar con la cesta sin hacerlo), lo que tampoco es sospechoso a priori. Sin embargo, al realizar el pedido hay otro cambio que puede despertar las alertas o sumir al consumidor en la euforia: “En el momento de pagar, te aparece el mensaje de lucky offer, y ves que hacen una rebaja del 58 %”, cuenta Gómez Serranillo.
Es decir, que el pedido, si ya de por sí parecía barato, acaba pareciendo aún más rentable porque el comprador ha tenido suerte. “Los ojos te hacen chiribitas”, narra este cliente. Solo faltaba confirmar el pago y la engañifa se completaría. “Acabas pagando por PayPal porque te da error en la tarjeta. Rellenas tus datos, rellenas todo, pero te da error. Entonces ya te pispas. Ves que no puede ser y caes en que es una web falsa”, describe Gómez-Serranillo.
Reclamación a PayPal
Por suerte, él se dio cuenta de que era una trampa el mismo día que efectuó la compra. “Piensas que esto es muy raro”, agrega, porque además el pago de PayPal no se hace a una entidad, sino a una persona con nombre y apellidos. Como ha mostrado Gómez-Serranillo a este medio, a un tal Nikolas Lakia. También tiene un nombre extraño el titular del dominio, Fioai Lksoak, que, según reflejan las páginas que muestran los datos de contacto públicos de cualquier dominio ya registrado, creó el sitio en julio de 2022.
Este afectado inició entonces una reclamación a PayPal en la que, con los pantallazos correspondientes, exponía que era una página falsa. Pasados “unos diez días”, PayPal le dio la razón y devolvió su dinero a Gómez-Serranillo, que, en cierto modo, tuvo la suerte de actuar rápido.
Gymshark conoce el fraude
En el foro de valoraciones Trustpilot se recogen testimonios de otros que no lo fueron tanto. Por ejemplo, un comprador asegura que el pasado febrero hizo un pedido que nunca llegó. En ocasiones, Gymshark responde a estas valoraciones explicando que no existe tienda en España. Es decir, que tienen constancia de que hay alguien que defrauda en su nombre, pero aún no lo han solucionado.
“Lamentamos mucho saber que ha sido víctima de un fraude. Te aconsejamos que te pongas en contacto con la policía y tu banco para denunciarlo, ya que ellos podrán recuperar tu dinero. Estamos persiguiendo las cuentas falsas cada vez que nos las señalan, y mantenemos conversaciones periódicas con todas las plataformas de redes sociales que utilizamos actualmente para desactivar definitivamente estas cuentas falsas”, contestan a un comprador estafado. “No vendemos nuestros artículos a través de terceros, sólo a través de nuestra página web oficial, www.gymshark.com”, dicen a otro.
Una cartera o unas gafas de plástico
Si sufrir una estafa ya es bastante frustrante, también hay quienes han tenido la sensación de que el timador les vacila. “El 7 de febrero hice un pedido de dos leggins y un top (total 104 €) en la página de Gymshark España. Ayer día 20 de febrero me llegó el esperado pedido, sorpresa la mía, que el paquete no medía más de 20 cm y en su interior había una cartera, cuyo precio no creo que llegue a un euro”, explica otra afectada, que considera que “la página fraudulenta es exactamente igual que la buena”.
En la misma línea, otro indica en Trustpilot que perdió 80 euros comprando ropa y a cambio le llegaron “unas gafas de plástico de mala calidad”. Por si fuera poco, los clientes no son los únicos perjudicados en este engaño: en el apartado de Declaración de Privacidad de la página fraudulenta se hace referencia a la ley correspondiente y se cita a MGC ESHOES COMMERCE SL, como si ésta fuera la empresa que está detrás de Gymshark España. Algo totalmente ilógico, porque si se tratase de una firma británica no podría tener detrás a… una marca dedicada al comercio de calzado y ropa con sede en un pueblo de Navarra: Megacalzado.
Doble suplantación de identidad
Este medio ha preguntado a Megalcazado para saber por qué la falsa Gymshark utiliza su nombre, y desde la empresa navarra explican que, efectivamente, se trata de una suplantación de identidad que afecta a los consumidores y a una empresa honrada como la suya. “Tenemos identificadas casi 100 webs falsas que usan el nombre de nuestra empresa. Llevamos más de un año con esta situación”, agregan. A pesar de haberlo denunciado a la Guardia Civil y a la Agencia Española de Protección de Datos, y de haber pedido al hosting (Alibaba) que elimine las webs fraudulentas, el delito continúa.
“Casi todos los días nos llaman clientes estafados. Nunca reciben los productos, o reciben artículos que no tienen nada que ver con lo comprado”, lamentan. Todo esto resulta muy negativo para su reputación, porque se ven implicados en un delito del que también son víctimas. Incluso, dicen desde Megacalzado, han recibido reclamaciones a través de organismos de consumo oficiales de varias comunidades autónomas, lo que les obliga a gastar tiempo y recursos para no ser sancionados y demostrar que ellos no están detrás de estas webs. “Es una situación kafkiana”, describen.