Todas las unidades se agotaban en pocas horas cada vez que se ponía a la venta, tanto en Internet como en los establecimientos, donde se formaban largas colas para hacerse con alguno. Esa era la expectación que despertaba en España y en otros países del entorno Monsieur Cuisine, el robot de cocina de la cadena de supermercados germana Lidl. Por menos de 400 euros un usuario podía conseguir un aparato con unas prestaciones parecidas a las del emperador del sector: Thermomix, que cuesta 900 euros más.
Sin embargo, se acabó la fiesta. Una sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 5 de Barcelona obliga a la cadena alemana a dejar de vender su aclamado aparato por haber plagiado la patente de Vorwerk, la empresa que fabrica la Thermomix. No obstante, la guerra por dominar el sector se recrudece debido al vacío que deja el aparato de Lidl y el prestigio de determinadas marcas se enfrenta a los precios de derribo de otras firmas con dispositivos que ofrecen funcionalidades muy similares.
Thermomix también denunció a Taurus
Lidl no es la única compañía con la que Vorwerk se ha enfrentado en los tribunales a cuenta de la Thermomix. La firma alemana perdió en 2013 contra la española Taurus en un litigio en el que los germanos también afirmaban que se habían vulnerado algunas de sus patentes. “Cada vez hay más tecnología, más inventos y, por tanto, más patentes. La empresa que invierte en investigación quiere sacar rendimiento. La forma es tener la exclusiva o adoptar un régimen de licencias para que les paguen por su uso”, explica a Consumidor Global el abogado Jorge Grau, uno de los socios fundadores del bufete Grau y Angulo y que defendió a Taurus en aquel caso.
El jurista señala que “a veces se abusa de la propiedad intelectual” y se piden muchas patentes sobre un mismo producto. De hecho, la patente básica de Thermomix “hace muchos años que caducó”, sin embargo, este experto apunta que se han ido incorporando elementos novedosos al aparato y que son los que se utilizan para atacar a terceros. “En el caso de Taurus fue lo que reclamaban, pero ganamos”, subraya. Debido a cómo está montado el sistema de patentes en la Unión Europea, las acciones de la empresa que acude a la Justicia se tienen que resolver de forma individual en cada país. Así, la batalla entre Vorwerk y Taurus también se libró en los tribunales de Portugal, Francia, Alemania e Italia y “hubo resoluciones para todos los gustos”, asevera Grau.
¿Qué diferenciaba a Monsieur Cuisine y a Thermomix?
En los análisis de ambos aparatos realizados por diferentes expertos se reseña que la relación calidad precio del Monsieur Cuisine --359 euros-- era incontestable, mientras que la Thermomix TM6 --1.259 euros-- se sitúa en lo más alto de los principales listados de asistentes de cocina del mercado, tanto por la calidad de sus materiales como por sus prestaciones. En cuanto al tamaño y el peso, la de Silvercrest es más grande y pesada, pero en relación a la capacidad del vaso vuelve a recuperar terreno frente a su competidor.
Los dos robots de cocina se pueden conectar a Internet y ofrecen acceso a recetas guiadas para que los usuarios puedan desplegar todas sus dotes culinarias. si bien Thermomix ofrece una mayor variedad en este apartado. Por otro lado, ambas máquinas cuentan con báscula y temporizador. Sin embargo, uno de los apartados que más marca la diferencia es la discontinuidad en el mercado del robot de Lidl, que se lanzaba en pocas ocasiones al año, por ejemplo, durante el Black Friday, mientras que la Thermomix está disponible siempre, aunque a un precio no tan asequible.
El frente del ‘low cost’
El vacío que deja Monsieur Cuisine en la disputa con Thermomix por el imperio de los robots de cocina tiene muchos aspirantes. En los últimos años multitud de empresas han lanzado sus propios asistentes de cocina, por ejemplo, Bosch, Kenwood o Moulinex, entre otras. Todas ellas son marcas punteras y sus productos suelen encontrarse en las primeras posiciones de las comparativas. Sin embargo, en el contexto de crisis económica actual y con el interés por la cocina que despertó en muchos el confinamiento, la batalla principal se libra en el segmento low cost.
El Black Friday aparece marcado en rojo en el calendario de muchas empresas. En torno a esa fecha, multitud de marcas y cadenas aprovechan para posicionar sus productos con precios asequibles. En este grupo de robots se sitúa, por ejemplo, el Quigg de la cadena de supermercados Aldi, que estuvo disponible en sus tiendas por 229 euros desde el 31 de octubre de 2020 y hasta que se agotaron las existencias. Según la empresa, las cifras de venta de esta máquina no han dejado de aumentar desde su lanzamiento en 2018. Entre sus prestaciones figuran nueve modos de cocina diferente, una potencia de 1.200 vatios, la conexión wifi y una app con 200 recetas. Asimismo, también está el Mambo 6090 de Cecotec, que, por 170 euros, ofrece pantalla digital, 23 funciones distintas, puede preparar tres platos de forma simultánea y tiene una potencia de 1.700 vatios, aunque carece de aplicación móvil y conectividad a Internet.
Un rival emergente desde China
Si bien todavía no está disponible en España, uno de los últimos en unirse a la guerra de los robots de cocina es el Multi-Purpose Cooking Robot de la marca OCooker. Este aparato se encuentra a la venta, de momento, en la plataforma propia de e-commerce de Xiaomi, aunque no pertenece a la firma china, aseguran desde la empresa a este medio.
El OCooker ha generado bastante revuelo mediático y, a pesar de que no compite con precios de derribo --su coste es de alrededor de 750 euros--, su introducción en el mercado y la similitud de sus prestaciones pueden suponer otro quebradero de cabeza para Thermomix. Sin duda, en este segmento la guerra está servida, nunca mejor dicho.