Las funcionalidades de Google Maps van más allá de lo que parece y ofrece una ventajas que pocos conocen, de momento. El servicio de navegación del gigante tecnológico se ha popularizado hasta límites insospechado y cada año se agregan nuevas funcionalidades que hacen la vida más cómoda y eficiente para quienes se desplazan en diferentes medios de transporte
Google ha presentado su memoria de sostenibilidad correspondiente al último año. Un extenso documento en el que se recogen todas las iniciativas, acciones e inversiones que Google realiza para contribuir a la mejora del medio ambiente y la reducción de la huella de carbono de todas sus actividades, tal y como informan desde el diario El Motor.
La funcionalidad secreta
Una de las cuestiones que recoge este informe es su apuesta por las opciones de transporte más eficientes, tomando Google Maps como una de las referencias en este sentido. En concreto, se refiere a la puesta en marcha de la elección de rutas eficientes en el cálculo de sus trayectos por carretera en vehículos a motor.
Google señala que las búsquedas sobre “cómo ahorrar combustible al conducir” se han incrementado en un 60% en 2023 en relación al año anterior. Una evidencia que constata el interés de los usuarios por economizar en gasolina, bien sea por razones medioambientales o simplemente mirando a su bolsillo.
Un ahorro de 1,2 millones de toneladas de CO2
Para considerar el impacto que las instrucciones de navegación de Google pueden llegar a tener, se debe saber que su aplicación de mapas ofrece cada día más de dos billones de kilómetros de tránsitos públicos. Este uso masivo de su tecnología se traduce en efectos significativos en la movilidad general del planeta.
La disponibilidad de las rutas eficientes corresponde a Estados Unidos, Canadá y 40 países europeos, además de Egipto. Y los cálculos de la compañía apuntan a un ahorro de 1,2 millones de toneladas de CO2 gracias a su uso en estos territorios durante el pasado año. Del mismo modo, Google señala que esa cantidad de emisiones anuladas equivalen a dejar fuera de circulación a 250.000 automóviles de combustión durante todo un año.