A las ocho de la mañana con el chaquetón puesto. Llega el mediodía y su merecido recreo. Varios niños se despiden del abrigo y corren alborotados por el patio. El aún caliente sol resta importancia al viento que hace estremecer la piel. Al primer estornudo le sigue el segundo en poco tiempo. La transición del verano al invierno va acompañada de narices rojas. Este año, también lleva asociado un repunte de casos de infecciones respiratorias, lo que ha provocado un pico en la demanda de amoxicilina, que suele recetarse para neumonías y bronquitis. No obstante, este antibiótico está agotado, especialmente en jarabe.
El Ministerio de Sanidad ya se ha hecho eco de la falta de suministro, y en las farmacias se nota, actualmente, el desabastecimiento en su formulación pediátrica. “No tenemos amoxicilina en frasco de 120 miligramos. Al pedir este medicamento a Bidafarma –una cooperativa de distribución mayorista– pone ‘comunicado al Ministerio’. Eso significa que la espera va a ser larga”, explica a Consumidor Global María del Carmen Ríos, quien regenta una farmacia en San José de la Rinconada (Sevilla).
Algunas presentaciones agotadas
“Sí, ha habido días en los que hemos tenido falta de alguna presentación de amoxicilina, aunque existen otras presentaciones con las que no hay problema de suministro”, reconoce Juan Pedro Rísquez, vicepresidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos. “Es cierto, que esta escasez ha creado tensión, coincidiendo además con incremento de pacientes con patologías respiratorias, lo que ha producido un pico de demanda”, añade. De hecho, en el Hospital de Sant Pau, en Barcelona, advierten de que estos últimos días están recibiendo unas 120 consultas diarias sobre bronquiolitis infantil mientras que habitualmente suelen atender entre 30 y 40 cada día sobre temas pediátricos en general.
No obstante, Rísquez asegura que esta escasez no se ha convertido en un problema asistencial de cara a los niños y niñas. “Se les ha ofrecido la medicación que han necesitado. Este problema ha afectado a un medicamento que tiene una sustitución posible porque el farmacéutico soluciona prácticamente el 90 % de los casos de problemas con el suministro de estos medicamentos con otros que sean asimilables, que tenga igual composición”, destaca.
Hay alternativas
Los colegios de farmaceúticos están atendiendo las peticiones de información de los establecimientos que, aunque en algunos casos tienen autorización para elaborar fórmulas magistrales, tampoco tienen fácil el acceso al principio activo que también escasea en los almacenes habituales. En todo caso, Marta Roig, vocal del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona, considera que el país no está en una situación límite.
“Se pueden tratar porque se buscan alternativas y otros antibióticos”, afirma Roig. No obstante, esta falta de suministro de amoxicilina no sólo ocurre en España, también en el resto del mundo. “Cualquier problema de este tipo repercute a nivel mundial. Hay pocos laboratorios fabricantes. Si uno se queda sin medicación, luego es una cuestión de cadena”, señala la farmacéutica.
¿De dónde viene el desabastecimiento?
La amoxicilina se utiliza para las infecciones bacterianas y suele recetarse como protección secundaria para las infecciones de oído o la neumonía. “Nadie sabe cuánto durará, pero hay un par de razones para la escasez. En general, los antibióticos son medicamentos genéricos que existen desde hace años. Tienden a ser más baratos y tienen menores márgenes de beneficio que los medicamentos más nuevos”, explica la doctora Madeline Camejo, vicepresidenta de servicios de farmacia de Baptist Health South Florida.
“Esto significa que las empresas farmacéuticas tienen muchos menos incentivos para establecer cadenas de suministro sólidas y resistentes, y pueden quedarse cortas si algo va mal en un proveedor de la competencia o si hay un aumento en la demanda, que es lo que está ocurriendo ahora. Por el momento, los proveedores están tratando de satisfacer la demanda, pero han puesto límites en la cantidad que las farmacias pueden pedir”, indica Camejo sobre la situación actual.