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Otoño caliente: las expectativas de consumo y de ahorro de los hogares se desploman un 24% y un 32%

La confianza de los consumidores se ha reducido 42,5 puntos en el último año, hasta situarse en 55,7 puntos sobre 200

Consumidor Global

Dos consumidores preocupados por el ahorro, en un mercado municipal / AYUNTAMIENTO DE HUELVA

La situación de incertidumbre económica y las elevadas tasas de inflación han recortado las expectativas de consumo de los hogares un 24 % en el tercer trimestre con relación al mismo trimestre de 2021. Por su parte, las posibilidades de ahorro han bajado un 32,6 %.

Son datos del indicador de confianza de los consumidores correspondiente a septiembre, publicado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Según este informe, en comparación con el segundo trimestre, las expectativas de consumo de las familias bajaron 12,4 % entre julio y septiembre, en tanto que sus expectativas de ahorro disminuyeron un 15,9 %.

La confianza de los consumidores se hunde en el último año

Según el CIS, la confianza de los consumidores se ha reducido en 42,5 puntos en el último año, hasta situarse en 55,7 puntos. Las expectativas bajan 49,2 puntos y la percepción sobre la situación actual en 35,9 puntos. En términos porcentuales, la confianza de los consumidores ha disminuido en el último año un 43,3 %. Sobre la metodología, el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) recoge valores de entre 0 y 200, considerándose que por encima de 100 la percepción es positiva y por debajo, negativa.

También baja la valoración de la situación económica, que baja el mes de septiembre en 47,2 puntos, frente a los 83,1 puntos de un año antes. Entre otros factores, pesa la valoración de la economía, la situación del mercado laboral y la de los hogares. Por su parte, el indicador de expectativas se situó en septiembre en 64,3 puntos, casi 50 puntos por debajo del registrado un año antes. Este indicador hace referencia a las expectativas sobre la situación de la economía, las valoraciones sobre el futuro inmediato del mercado laboral, y las expectativas sobre la futura evolución de los hogares.