Loading...

¿Cuánto tiempo se tarda en aprender chino? El idioma que todos quieren saber, pero pocos aguantan

Filólogos y academias coinciden en que el interés de los españoles por el mandarín no deja de crecer porque cada vez está más valorado a nivel profesional

Teo Camino

Una chica estudia chino / FREEPIK

Antes, saber inglés era un mérito que garantizaba un puesto de trabajo. Ahora es un must en toda regla hasta el punto de que el 34% de las ofertas de empleo del año pasado en España exigían a sus candidatos el dominio de, como mínimo, un idioma extranjero. Y, en el caso de los recién licenciados, la estadística ascendía al 60%.

Incluso para muchas empresas tener conocimientos de dos lenguas foráneas es una condición sine qua non. En un mundo globalizado, en un país que vive eminentemente del turismo y las exportaciones, hablar idiomas es casi una obligación hoy en día.

Academias de lenguas asiáticas

“Dos de cada cinco academias han cerrado”, apuntaba Amalia Pedrero, profesora de Lengua Española en la Universidad CEU San Pablo. Sin embargo, escuelas como ClicAsia, Bunkyo y el Instituto Confucio, que imparten clases de lenguas asiáticas en la península, crecen en número de alumnos.

Los profesores de la escuela madrileña Bunkyo, donde se estudia chino, japonés y coreano / BUNKYO

Riqueza y lingüística

“El chino es el idioma cuya demanda ha crecido más en España”, asegura Pedrero, quien explica que la enseñanza de idiomas está directamente relacionada con un factor económico, o lo que es lo mismo, “con la idea de que me ayudará a encontrar trabajo”. No en vano, China es la economía que crece a un ritmo mayor a nivel mundial.

Pero el inglés sigue siendo el idioma más demandado por los españoles. Aunque “el chino, por el comercio, y el ruso, por el turismo, están en pleno auge”, expone Carmen Pérez Vidal, catedrática de Lengua Inglesa y Adquisición de Lenguas de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. Tanto es así que “algunos colegios están apostando fuerte por el multilingüismo y, en concreto, por el chino”, coinciden ambas filólogas. Desde la Escuela Bunkyo apuntan que la demanda por el japonés y el coreano -sobre todo por el K-pop- también ha crecido en el último año.

Un aprendizaje lento y poco gratificante

De las más de 6.000 lenguas que existen en el mundo, el chino mandarín figura en todas las listas de los idiomas más difíciles de aprender. “Es cierto que tiene cada vez más demanda, pero también lo es que no son muchos los que continúan sus estudios de chino debido a que es una lengua dificilísima en la que se avanza lentamente”, explica Pedrero, quien añade que hay mucho interés por el mandarín, pero que decae pronto porque conseguir un nivel medio-alto no es algo que se consiga en unos meses.

“Empecé a estudiar chino casi por casualidad y terminé pasando varios años en la Zhejiang University, la tercera mejor de China”, explica la maestra Andrea Telenti. “A mí me sirvió muchísimo a nivel profesional, pero el problema es que, además de difícil, la gente no le encuentra una funcionalidad porque cuando trabajas con los chinos se hace casi todo en inglés, ya que no es fácil ponerte a negociar en su mismo idioma”, añade. La recompensa no es directa ni es para todo el mundo, sentencia.

La revolución será digital o no será

Otro aspecto a destacar al hablar con las escuelas de idiomas en nuestro país es que debido a la pandemia han tenido que pasar de la noche a la mañana de las clases presenciales a clases online. Las academias han acatado las restricciones, han dividido sus grupos y en la actualidad su actividad es un 50% presencial y un 50% virtual.

Ante esta situación, las aplicaciones para el aprendizaje de idiomas en línea han sacado una buena tajada. “España es uno de los países donde más han crecido las descargas este año (232%)”, aseguran desde Babbel, el software de aprendizaje de idiomas que ofrece cursos por 60 euros al año. “Las clases completadas al día han subido más de un 66% desde el inicio de la pandemia”, sentencian.