Parece que los amantes del esquí tendrán menos alternativas el próximo invierno a la hora de practicar su deporte favorito. Las pérdidas millonarias y la falta de ayudas públicas han hecho que el consejo de administración de la estación de esquí de Candanchú haya decidido no abrir el complejo la próxima temporada, una decisión que ha puesto en alerta a los alcaldes del Valle del Aragón por los perjuicios económicos que conllevaría.
Las pérdidas de este año como consecuencia de las restricciones por la pandemia de Covid-19 hacen "insostenible" la viabilidad a medio plazo del proyecto si éstas se volviesen a producir con el potencial perjuicio para los empleados y agentes de la zona, afirma el centro invernal en un comunicado tras la decisión adoptada.
La nieve, un sector estratégico
Alegan, además, la "incertidumbre" que sigue provocando la pandemia a la hora de desarrollar la actividad empresarial, la falta de un plan de ayudas derivado de la situación de Covid-19 al sector, que "hasta la fecha no ha tenido apoyo desde las administraciones públicas", y la ausencia de un proyecto integral de la nieve en la comunidad aragonesa que no agravie al Valle del Aragón.
El anuncio ha causado preocupación entre los alcaldes del Valle del Aragón --de los municipios de Aísa, Canfranc, Villanúa, Borau, Castiello de Jaca y Jaca, así como la Mancomunidad Forestal del Valle de Aísa-- que en comunicado conjunto advierten de que el cierre perjudicaría "gravemente" la economía de la zona al ser la nieve un sector estratégico.
Crisis irreversible
Recuerdan que así lo considera el Gobierno aragonés y por ello promovió la creación de la empresa Aramón, con un 50 % de participación pública, que agrupa las estaciones pirenaicas de Formigal-Panticosa y Cerler y las turolenses de Valdelinares y Javalambre. Por ello, urgen a que se busque una solución al cierre de una estación de esquí que es "motor de todo un territorio" y reuniones urgentes con los consejeros de Industria y de Economía del Gobierno aragonés, Arturo Aliaga y Marta Gastón, respectivamente, así como con el presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, y representantes de Candanchú.
También el presidente del PP de Huesca, Gerardo Oliván, ha emplazado al jefe del Gobierno aragonés, Javier Lambán, a iniciar con carácter inmediato gestiones para garantizar la apertura de la estación de Candanchú la próxima temporada, al incidir en que de no hacerlo "podría ser el primer paso de una crisis irreversible en el turismo invernal altoaragonés".