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Saturación máxima: en esta playa española hay que esperar horas para entrar
Su éxito en redes sociales ha provocado que el lugar, para descontento de los vecinos de la zona, se haya masificado
La playa es el escenario por excelencia del verano. Entre las más visitadas de España destacan la playa de Roquetas de Mar (Andalucía), la playa de Las Catedrales (Galicia), la de Benidorm (Alicante), la de Las Canteras (Gran Canaria), Matalascañas (Huelva) o la de los Caños de Meca (Cádiz). No obstante, la masificación de algunas costas también ha provocado que se establezcan restricciones para proteger el entorno. Es el caso de la playa mallorquina de Caló d'es Moro, situada en el municipio de Santanyí, donde se forman colas para entrar.
Durante el verano, a esta playa acuden aproximadamente 3.000 personas al día. Su acceso es relativamente sencillo, lo que también provoca que acuda más gente. Tal y como informa el programa La ventana de la Cadena SER, hay vecinos de toda la vida que ya han desistido de acercarse a esa playa, porque es “un espacio reducido” donde todo el mundo busca “hacerse una foto". Precisamente, su éxito en redes sociales es también su condena.
“Está totalmente masificada”
En TripAdvisor, muchos viajeros que se han desplazado a esta playa alaban sus aguas turquesas y su entorno paradisíaco, pero también hay quienes se muestran muy críticos. “Cala de difícil acceso y masificada. Tienes que caminar 20 minutos para llegar, el último trozo es con pendiente. Una vez abajo, no encuentras sitio ya que hay muy poco sitio para sentarse y está totalmente masificada. Una calita no preparada para recibir muchos visitantes”, lamenta un visitante.
“Bonitas vistas y aguas transparentes. Unos quince minutos desde el aparcamiento. Se llega por un pequeño camino desde Cala S'Almunia. Está en el fondo de un acantilado. Difícil acceso para bajar y muy pequeña. En las fotos parece más grande. Si quieres ir, mejor madrugar”, aconseja otro.
El papel del ayuntamiento
El ayuntamiento de Santanyí, recoge el citado medio de la Cadena SER, ha limitado el aparcamiento, pero no todos los visitantes respetan estos límites.
“Las calles son muy pequeñas y como aparcan los coches donde quieren a veces no puedes llegar ni a tu casa, porque están bloqueando”, denuncia una vecina.
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