Los tapones de las botellas y los bricks son objetos cotidianos que pueden suponer un grave problema para el reciclaje y el medio ambiente si no se gestiona correctamente. Para ello, se ha optado por unirlos al envase, sin embargo, muchos consumidores se han quejado en las redes sociales de que los tapones son demasiado duros y difíciles de abrir, lo que les provoca dolor y molestias en los dedos.
Es el caso del tiktoker @jorgito.97, que se lamenta del tapón de la botella de Coca-Cola. En los comentarios del video colgado en su cuenta, algunos usuarios también se quejan de lo incómodo que son estos tapones, de hecho, varios aseguran que “los arrancan y los tiran por separado”. No obstante, las empresas han defendido sus tapones como una medida ecológica y responsable con el medio ambiente. “Pobrecito Jorgito con sus problemas del primer mundo”, bromea otro usuario.
El problema de reciclaje
El problema es que los tapones suelen estar hechos de plásticos diferentes a los de las botellas o los bricks, lo que dificulta su reciclaje. Por ejemplo, las botellas de agua suelen ser de polietileno tereftalato (PET), mientras que los tapones son de polipropileno (PP) o polietileno de alta densidad (PEAD).
Por eso, durante mucho tiempo se ha recomendado separar los tapones de las botellas o los bricks antes de depositarlos en el contenedor amarillo. Sin embargo, esta práctica también tiene sus inconvenientes, ya que los tapones sueltos pueden perderse o atascarse en la maquinaria de las plantas de reciclaje.
La normativa
Para solucionar este dilema, la Comisión Europea ha establecido una normativa que obliga a que todos los envases de bebidas tengan sus tapones unidos a partir del año 2024. De esta forma, se pretende evitar que los tapones acaben en el medio ambiente y facilitar su reciclaje.
Mientras tanto, Ecoembes, la entidad encargada del reciclaje de envases en España, recomienda depositar las botellas y los bricks con sus tapones puestos en el contenedor amarillo. Según Ecoembes, las plantas de reciclaje cuentan con sistemas que separan los diferentes tipos de plásticos y permiten aprovecharlos al máximo.