Como Elliot en E.T. o como Tito en Verano azul. Montar en bicicleta suele ser sinónimo de diversión y aventura. Y eso mismo es lo que hacía falta hace dos años, tras finalizar el confinamiento de tres meses por culpa de la pandemia. La demanda de bicis se disparó, no solo las que están tras las vitrinas de las tiendas, sino también las usadas que se promocionan tras la pantalla. Este mercado de segunda mano ha crecido en los últimos años y cuenta con una gran cantidad de seguidores que tienen el ciclismo por hobby.
Milanuncios confirma que la demanda de bicicletas ha crecido este verano un 17 % respecto al anterior. Sin embargo, la oferta cayó un 15%. “Los años 2020 y 2021 han sido excepcionales. Venimos del mayor pico de oferta y demanda de bicicletas de segunda mano. La pandemia hizo que fuera un mercado en auge y ahora no es que estén bajando los datos, sino que se está estabilizando”, explican desde la plataforma.
Sube el precio
Cabe destacar que, según los datos de ese sitio web, la demanda ha crecido un 22 % entre mayo y julio con respecto al resto del 2022. “Cada vez más personas buscan bicis de segunda mano y la oferta sigue subiendo, aunque la demanda crece más rápido que la oferta”, comentan.
Sin embargo, su precio medio ha subido 6 euros de media con respecto al año pasado –ahora se venden a 479 euros mientras que en 2021 la media era de 473–. Pero el encarecimiento no es a lo único a lo que se enfrenta el consumidor.
Cuidado con las estafas
Las estafas y los timos son el pan de cada día en la venta online de objetos de segunda mano, donde no existe un control. Se trata de un mercado en el que un porcentaje de los artículos procede del robo de bicicletas. Desde el año 2011 constan, según datos del Gobierno, casi 223.000 sustracciones de bicicletas.
Pero hay fórmulas para reducir el riesgo. Por ejemplo, Tuvalum, la web número uno en Europa para comprar y vender bicicletas de segunda mano, tras ser revisadas por mecánicos, se encarga de que los clientes no caigan en la trampa y compren una robada o defectuosa.
Registro del número de serie
“En plataformas como Milanuncios o Wallapop no hay un intermediario para verificar el estado de la bicicleta. Todo recae en el nivel de honestidad del vendedor”, resaltan desde la empresa, que explican que ellos mismos las revisan antes de enviarlas al comprador y toman un registro documental del número de serie. “Las que compramos nosotros, firmamos un contrato de compraventa y aplicamos un protocolo de verificación con la policía para asegurar que no hay ninguna denuncia por robo”, detallan.
Una bici de segunda mano / FREEPICK
En concreto, las bicicletas que ellos venden no son las que se usan en el día a día en la ciudad. Son de alta gama y están dirigidas a un sector profesional. Pueden alcanzar los 3.000 euros. Es por ello que, la mayoría de los interesados conservan el recibo y el número de bastidor. Sin embargo, este tipo de bicis también se están colando en portales no tan fiables, y algunas por un valor superior a su precio inicial de compra.
Las claves para que no te la cuelen
A través de Wallapop, este medio se pone en contacto con un vendedor que oferta una bicicleta Kymco Q, por un precio de 2.000 euros, mientras en la página web de la marca, se rebaja hasta los 1.799 euros. En un principio, el usuario asegura que mantiene la oferta, pero al volver a contactar, el chat fue bloqueado y solo se podía leer: “Esta persona ha sido excluida por presunta actividad sospechosa”.
“Antes de comprar cualquier bici de segunda mano en estas plataformas, hay que fijarse en el número de bastidor. También es importante la capa de pintura por si está tuneada. Otra cosa que hacen mucho es colocar pegatinas para tapar algunas fisuras y despistar al cliente. Hay que revisar el estado general y asegurarse de que todos los componentes estén bien”, aconsejan desde Tuvalum.
Cómo recuperar una bici robada
Y es que, lo más frecuente es que una bicicleta robada acabe vendiéndose por internet. “Lo primero que hay que saber para recuperar una bicicleta es que es importante guardar algún justificante, como la factura, el registro de la garantía o el número de bastidor. Si no es así, es muy difícil identificarla a no ser que se tenga una foto”, explican desde la empresa. Si la encuentras en algún portal de venta online, lo primero es denunciar a la policía.
En Milanuncios hay incluso personas que cuelgan anuncios para advertir sobre su bicicleta robada y ofrecen recompensas de hasta 200 euros si alguien la encuentra en la misma plataforma. Está claro que la demanda de bicis de segunda mano ha crecido en los últimos años, pero, con ella, también los posibles intentos de estafa por parte de timadores.