Las arrugas son el maquillaje del tiempo. Inevitablemente, los años y la edad se imprimen en la piel, no obstante, hay maneras de detener esas agujas del reloj que se reflejan en la cara. La jefa de servicio de Dermatología y Medicina Estética de Olympia Quirónsalud, María Calvo, ha explicado a Consumidor Global cuáles son los mejores tratamientos para evitarlas.
Los principales factores que provocan que aparezcan arrugas, según la dermatóloga, son la propia genética, la reabsorción ósea, la grasa con el paso del tiempo, la flacidez y la exposición solar. “Hay dos tipos de arrugas, las de expresión que aparecen en mitad superior de la cara, como son el entrecejo, la frente y las patas de gallo; y las que llamamos estáticas en la mitad inferior, en el surco naso geniano y las comisuras laterales de la boca”, explica Calvo.
Tratamientos recomendados
“Los hábitos para retrasar la aparición de arrugas pasan por reducir la exposición solar, tener una dieta sana rica en antioxidantes, realizar rutinas diarias de cuidado facial con limpieza y usar cremas que aporten principios activos que hayan demostrado su eficacia antirrugas, como por ejemplo el retinol o el ácido hialurónico”, recomienda la experta a este medio.
Sin embargo, una vez hayan aparecido las arrugas, Calvo señala, bajo su juicio, cuáles son los mejores tratamientos a seguir para quitarlas. “Sugiero aplicar bótox para arrugas de expresión. Por otro lado, el ácido hialurónico, los estimuladores de colágeno o los láseres fraccionados ablativos son buenos para las estáticas”, destaca la doctora de Quirónsalud, que asegura que “ningún tratamiento médico aprobado científicamente es peligroso para la piel”.
¿A favor de quitarlas?
La jefa de Servicio de Dermatología y Medicina Estética expone que la edad a la que estos pliegues en la piel comienzan a salir es muy variable. “Las arrugas de expresión pueden aparecer entre los 20 y 25 años”, apunta. Por otra parte, los primeros signos visibles del envejecimiento comienzan a partir de los 30 años, como las arrugas del entrecejo y las patas de gallo. Aunque, no hay que olvidar que la genética, el sol, el tabaco, una mala alimentación o el estrés son factores extrínsecos que influyen en la aparición de arrugas.
“Cómo dermatóloga, estoy a favor sobre todo de prevenirlas si es posible y, si ya es tarde, de suavizarlas para suavizar expresiones faciales más toscas. Eso sí, siempre bajo tratamientos médicos realizados por especialistas”, finaliza Calvo.