La ropa con manchas amarillas o avejentada puede parecer descuidada y desaliñada, lo que puede afectar de manera negativa, y de forma directa, a la imagen y la percepción que los demás tienen de una persona. En cambio, los tonos claros y brillante en la ropa se asocian con limpieza, frescura y cuidado. Por eso, conviene conocer cómo blanquear la ropa.
Cuando los textiles lucen un blanco brillante, brindan una sensación de higiene y bienestar. En la misma línea, las sábanas y colchas blancas aportan una sensación de paz y tranquilidad en el dormitorio, favoreciendo la luminosidad y la armonía. En cualquier caso, también conviene considerar qué implica realmente la calidad y durabilidad de las prendas: el hecho de que el algodón y el lino sean materiales mejores que el nailon no significa, necesariamente, que no vayan a amarillear antes.
¿Por qué la ropa se amarillea?
El contacto constante con el sudor y la grasa corporal puede hacer que las partículas se acumulen en las fibras de la ropa, especialmente en zonas como las axilas, el cuello y la parte trasera de la camisa. Con el tiempo, estos restos se oxidan y adquieren un tono amarillento.
También hay que prestar atención a cómo y con qué se limpia, puesto que algunos detergentes y suavizantes pueden contener agentes blanqueadores ópticos que, con el tiempo, pueden debilitar las fibras de la ropa y hacer que se tornen amarillentas. Asimismo, la exposición prolongada a la luz solar puede decolorar la ropa, al igual que guardarla en lugares húmedos o con poca ventilación.
Cómo blanquear la ropa que tiene manchas amarillas
Existen diferentes opciones para blanquear ropa blanca amarillenta, aunque algunos productos (generalmente los más baratos) pueden terminar causando más problemas que beneficios.
Productos específicos para devolver el blanco a la ropa
La mayoría de los supermercados venden blanqueadores o quitamanchas específicos. Algunos de los mejores son los que no tienen cloro. Estos productos contienen ingredientes diseñados para eliminar las manchas y devolver el blanco original a la ropa.
Por ejemplo, la marca Vanish vende un quitamanchas en polvo sin lejía ‘Oxi Action’. Según este fabricante, se trata de un blanqueador “que acaba con las manchas en un solo lavado y deja tus blancos 5 tonos más blancos”. Es, además, eficaz en agua fría y ciclos cortos, y no daña las fibras textiles. En la misma línea, Cebralin vende un spray capaz de eliminar las manchas amarillas, blanquecinas y cercos en las axilas, incluso aquellas más sólidas.
Productos naturales
Además, hay productos naturales y económicos que puedes usar como alternativas más suaves y, generalmente, más baratas.
Vinagre de limpieza o vinagre blanco
El vinagre de limpieza o vinagre blanco es un ácido suave que tiene propiedades desinfectantes, desodorizantes y blanqueadoras.
Al ser un ácido, puede ayudar a eliminar manchas y suciedad de la ropa, y también puede neutralizar o eliminar olores desagradables. Además, al ser un ingrediente natural y suave, es una alternativa más segura y ecológica que los blanqueadores químicos agresivos.
Bicarbonato de sodio y percarbonato
El bicarbonato de sodio es un abrasivo que también puede servir para eliminar las manchas y la suciedad de la ropa. Es similar al percarbonato blanqueante, un quitamanchas natural que se vende, entre otros establecimientos, en Mercadona.
Con este producto se pueden conservar las prendas de ropa blanca (camisas, toallas, almohadas…) como el primer día. También sirve para limpiar zapatillas de lona blanca, si bien en este caso hay que evitar, en la medida de lo posible, el contacto de los ojales metálicos. Tampoco debe usarse en tejidos delicados, como lana, seda, terciopelo, lino, cuero, pana, yute y tejidos no lavables al agua. Tampoco se debe añadir directamente sobre botones, cremalleras o partes metálicas de las prendas.