El término Patrimonio Mundial, más conocido como Patrimonio de la Humanidad, es el título que la Unesco confiere a determinados sitios del planeta (que pueden ser naturales, como bosques y lagos; o culturales, como ciudades y pueblos) que tienen un valor excepcional. En la actualidad hay más de 1.000 sitios considerados Patrimonio Mundial repartidos por más de 160 países. Italia, China y Alemania son los que más aglutinan; pero hay una ciudad española única que alberga cuatro.
Se trata de Córdoba, esa urbe a la que Góngora llamó “la flor de España”, con “torres coronadas / de honor, de majestad, de gallardía”. Es una ciudad patrimonial que rebosa Historia conocida principalmente por su Mezquita-Catedral, pero que tiene muchos más monumentos únicos. De hecho, la ciudad andaluza es un crisol de culturas en el que está presente la huella romana, judía e islámica.
La Mezquita, el centro histórico, la Fiesta de los patios y Medina Azahara
Tal y como recoge la página de Turismo de la ciudad, Córdoba cuenta con cuatro inscripciones en la Lista del Patrimonio Mundial concedidas por la Unesco: La Mezquita-Catedral (1984), el centro histórico que la rodea (1994), la Fiesta de Los Patios (2012) y Medina Azahara (2018). De este modo, el número de bienes Patrimonio de la Humanidad es superior incluso al de París o Roma.
Quizá el tercero sea uno de los más curiosos, al tratarse de una explosión de tradición y color en la que el blanco de los muros contrasta con la vivacidad de los lirios o los geranios.
Segundo casco histórico más grande
En cuanto al centro, las callejuelas estrechas son una joya cordobesa que merece la pena recorrer en cualquier momento del año. Y hay que dedicar su tiempo a ello: el de Córdoba es el segundo casco histórico más amplio de Europa.
Además, como el resto de España, la ciudad andaluza disfruta del título de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad concedido también al Flamenco (2010) y a la Dieta Mediterránea (2013).