Según un estudio de CertiDeal, cuatro de cada diez personas renuevan su móvil cada dos años. Pero, ¿y la funda? ¿Con qué frecuencia se cambia? Sea cada año o cada mes, uno de los principales protagonistas a la hora de hacerlo es La Casa de Las Carcasas. Sus tiendas se reconocen por el intenso color verde de la fachada, el mismo que está presente en la bandera de Extremadura. En esta comunidad, concretamente en el pueblo de Jarandilla de la Vera (Cáceres), se fundó la empresa hace diez años.
Sus cuentas del ejercicio de 2020 (las últimas disponibles) revelan que la empresa creció en facturación y en patrimonio. Las ventas ascendieron a 50 millones de euros en 2020 frente a los 45 del año pasado. Igualmente, de los 7,8 millones de euros de beneficio en 2019 pasaron a los 9,8 en 2020. Es decir, que va viento en popa a pesar de haber vivido cierres por la pandemia y de enfrentarse a una inflación creciente.
250 tiendas en Europa, pero fundas chinas
En Consumidor Global nos hemos desplazado a tres tiendas de La Casa de Las Carcasas ubicadas en el centro de Madrid. Son una pequeña muestra de las más de 250 que tienen repartidas por España, Italia y Portugal. En la más cercana a Callao nos cuentan que las carcasas vienen desde China. Todas. Lo cierto es que en la etiqueta no aparece ninguna información sobre el origen, y en la web tampoco se dice dónde están fabricadas. Al término de este reportaje, la empresa no ha respondido las preguntas de este medio sobre este asunto.
Tampoco es algo que oculten. Los propios trabajadores reconocen que no fabrica las fundas. Así, el negocio está en personalizarlas en España (ya sea con el logo del Rayo Vallecano o con una foto en pareja al atardecer) y en comercializarlas. Los precios no son caros: de unos seis hasta 17 euros. No obstante, en Amazon y Aliexpress es posible encontrarlas casi por la mitad de precio.
Una empresa que vale más de 100 millones de euros
En septiembre de 2021, la gestora ProA Capital compró una participación mayoritaria en La Casa de las Carcasas. Según diversos medios especializados en economía, la operación superó los 100 millones de euros. Esta cifra dejaría claro la pujanza de la empresa.
Antoni Cunyat, profesor de los estudios de Economía y Empresa de la UOC, explica que el hecho de que un negocio como el de La Casa de Las Carcasas esté triunfando es algo “típico de épocas de crisis”. El profesor indica que hay personas que sólo pueden cambiarse el móvil “cada cuatro o cinco años”, por lo que sustituir la funda opera a nivel psicológico: de algún modo, “es como si tuvieras uno nuevo”, señala Cunyat.
Memes, sospechas y personalización
En Twitter y en foros de usuarios siempre ha habido muchas bromas con La Casa de Las Carcasas. Memes, risas y también sospechas. “A mí este negocio me ha olido siempre raro”, escribe un bloguero, mientras que un tuitero opina que “Nadie compra ahí”, en referencia a que las tiendas suelen verse muy vacías. Otro va más allá y hace un “llamamiento a Equipo de Investigación para que se pasen por La Casa de las Carcasas”. En la misma línea, Davi pide a Netflix “un documental sobre la Casa de las Carcasas al estilo El timador de Tinder”.
Ana Jiménez-Zarco, profesora de Economía y experta en marketing de la UOC, señala que una de las claves de su éxito radica en que siempre tienen un ojo puesto en las modas. Además, su capacidad para ofrecer opciones personalizadas permite una mayor conexión emocional con el consumidor. Esto no se limita a fundas con las iniciales del nombre, sino que hay carcasas con el logo de ACDC o de la NASA. Además, han realizado colaboraciones con entidades de la talla de El Chiringuito de Jugones o influencers como La Vecina Rubia. Para llegar a los móviles, escuchan la conversación.
Apuesta por las tiendas físicas en un mundo digital
La empresa abrió 42 nuevas tiendas en 2020. Esta jugada, que podría calificarse de valiente o de arriesgada, es lo que permite a la empresa mejorar las ventas. El año en el que muchas compañías se vieron obligadas a cerrar y la digitalización se convirtió en el paradigma, la firma extremeña redobló su apuesta por la presencialidad.
Según Cunyat, La Casa de Las Carcasas no puede competir con Amazon o Aliexpress a nivel de precios, por lo que su manera de distinguirse consiste en tener capilaridad. “El mercado de las fundas de móviles es muy competitivo, y esa expansión en tiendas supone afianzar el nombre marca”, detalla el economista.
10,9 millones de euros en alquileres
Las cuentas de la empresa revelan que, en 2020, la empresa pagó por arrendamientos (es decir, por el alquiler de sus espacios) 10,9 millones de euros. Son tres más de lo que pagó en 2019. En Madrid hay varias tiendas en pleno centro, en lugares como Callao, Sol y Fuencarral. En Barcelona superan la decena de locales. En Valencia hay tres rodeando la Plaza del Ayuntamiento, apenas a 500 metros de la misma. Es de suponer que, aunque los locales sean pequeños, el alquiler sea costoso. Pero los gastos no van mucho más allá. “No necesitas maquinaria ni mucho personal, como en otro tipo de negocios”, detalla Cunyat, que subraya la importancia de unos costes fijos poco elevados.
Otro de los puntos fuertes es la amplitud de su catálogo. Jiménez-Zarco apunta que tienen fundas “también para smartphones de hace cinco o seis años, y no sólo para el último iPhone”.
La compra como acto social
El patrimonio, los fondos propios, también ha crecido: han pasado de 15,8 millones de euros en 2019 a 22,4 en 2020. ¿Efectividad? ¿Exitazo a pesar de que el cartel de cerrado haya colgado durante meses? Una de las trabajadoras de una tienda de Madrid cuenta a este medio que desde diciembre de 2020 las ventas van “bastante bien”. Asimismo, aclara que el porcentaje de cliente nacional y extranjero es 50%-50%. Este dato revelaría que no sólo compran turistas. Entre las incógnitas, cabe preguntarse qué porcentaje saca la empresa por cada carcasa y cuántas ventas proceden del canal online.
Ana Jiménez-Zarco destaca que el momento de la compra es una experiencia, un “acto social” para determinados clientes, como los adolescentes. “Si una joven de 13 o 14 años sale con varias amigas y va a mirar tiendas, quizá no pueda comprarse unos vaqueros o un jersey, pero sí pueden, todas ellas, comprarse el último diseño de funda”, argumenta. En este sentido, define las carcasas como un producto económico que “se ha convertido en un complemento de moda más”.