Carrefour continúa impulsando el textil sostenible con la apertura de dos nuevos espacios en España para la venta de ropa de segunda mano en los hipermercados de Móstoles (Madrid) y Tarrasa (Barcelona), según informa en un comunicado.
En concreto, la enseña cuenta desde 2021 con dos corners en Madrid y Barcelona y desde la apertura de esos dos primeros puntos de venta, ha comercializado ya más de 7.500 prendas, fomentando la economía circular.
Reducir la huella de la industria textil
Esta iniciativa forma parte del compromiso de la cadena de distribución con el medio ambiente en sus tiendas. En 2019, el grupo Carrefour y otras empresas del sector firmaron The Fashion Pact, un acuerdo y compromiso para reducir la huella que deja la industria de la moda y desde entonces desarrolla varias iniciativas como el aumento de productos sostenibles, especialmente para frenar el impacto de la fabricación de ropa.
De esta forma, entre las prendas más demandadas por los consumidores figuran los vestidos, las americanas y chaquetas y las camisas y blusas para niños y niñas.
Revisión de las prendas
La gestión de estos puntos de ropa de segunda mano se realiza con Patatam, una empresa especializada en prendas de segunda mano. Estos espacios ofrecen ropa de bebé, infantil, mujer y hombre y todas ellas han sido revisadas previamente para asegurar que cumplen con todos los requisitos de higiene y seguridad.
Carrefour se compromete a poner a disposición de sus clientes una moda más sostenible con su marca TEX, ofreciendo productos respetuosos con el medioambiente a lo largo de todo su ciclo de vida y garantizando la sostenibilidad de los materiales empleados, la transparencia y la reducción del impacto medioambiental de su cadena de aprovisionamiento y de su packaging.
Uso de plásticos
Por otro lado, trabaja para reducir el uso de plásticos en los packagings TEX, ha disminuido el número de etiquetas y ha reducido los formatos y pesos de los embalajes, el 100% de las perchas se fabrican con material reciclado desde 2019.
Además, desde hace 10 años todos los cartones de los packagings de los productos textiles estén certificados por FSC, entre otras iniciativas.