Scribd es una plataforma que se utiliza para compartir y leer documentos o libros en formato digital. Resulta muy útil para investigadores o para alumnos que están realizando un trabajo importante, ya que alberga una ingente cantidad de artículos académicos. “Por solo 10,99 € al mes, una suscripción proporciona acceso a millones de libros electrónicos, audiolibros, revistas, documentos, contenido profesional y más en tres productos exclusivos”, se detalla en la web.
Al igual que sucede con otros servicios digitales, el usuario puede disfrutar de un periodo de prueba. “¡Los primeros 30 días van por nuestra cuenta! Conoce la biblioteca digital más grande del mundo”, indica Scribd en su página. “Lea gratis durante 30 días. Sin compromisos. Cancele cuando quiera”, aseguran. No obstante, algunos lectores que en un momento puntual decidieron consultar Scribd consideran que el sistema de renovación automática es sibilino, ya que no se informa con la suficiente claridad de que la prueba gratuita ha concluido.
Suscripción sin dar la tarjeta
F. Sellés se suscribió al periodo de prueba gratuito con una cuenta de correo del trabajo, pero jamás hizo una compra como tal ni dio su número de tarjeta bancaria, explica a Consumidor Global. Sin embargo, llegado el momento, desde Scribd le cobraron. Lo hicieron un mes, y otro, y otro… hasta que finalmente se percató y trató de cortar la sangría.
“Yo no fui consciente de que me había suscrito hasta mucho tiempo después de que se me fueran cobrando las cuotas, cuando me di cuenta de que mensualmente se me estaba cargando un importe por algo que no sabía qué era. De hecho, después me enteré de que me estaban cobrando a través de Google Play (es decir, a través del número de cuenta que tenía en Google Play)”, recuerda.
Un correo para avisar del fin del periodo gratuito
El correo que recibió Sellés es claro: 1 month Free Trial to Recurring Monthly Membership (9,99E after free trial ends) (“Un mes de prueba gratuita a membresía mensual -9,99E después de que finalice la prueba gratuita-”). No obstante, este consumidor también apunta que en la página se especifica Don’t worry, we’ll email you before your trial ends (“No se preocupe, le enviaremos un correo antes de que su periodo de prueba finalice”). “Y eso no lo hicieron nunca”, insiste.
Por eso, Sellés considera que, al no alertarle debidamente, lo que hizo Scribd fue “un engaño y una manera amoral y dudosamente legal de sacar pelas al personal”.
10,99 euros al mes por un servicio inutilizado
“Me di cuenta por casualidad, al ver un día el histórico mensual de los últimos meses de mi cuenta (la verdad es que no la solía ver nunca. Tenía un pago de 9,99 euros al principio y después de 10,99 euros cada día 6 del mes”, relata.
Indignado, Sellés contactó con el servicio de atención al cliente de Scribd, desde donde alegaron que él había creado una cuenta bajo su propio conocimiento. Al crear su cuenta dentro de la base de datos de Scribd, indicaban, Selles había “comprado y autorizado una suscripción mensual recurrente durante el flujo de compra inicial al ingresar sus detalles de pago”.
165 euros perdidos
“Es responsabilidad del suscriptor cancelar y administrar sus propias suscripciones, así como sus propias obligaciones financieras”, insistían. No obstante, dado que no había utilizado Scribd, le reembolsaron a Sellés un total de hasta 6 meses de cargos. Este es el máximo absoluto que podían emitir, alegaban, debido a las limitaciones de su procesador de pagos. “Ha tenido suficiente tiempo para comunicarse con nosotros por cualquier cargo incorrecto que haya ocurrido durante este tiempo”, reprocharon a este consumidor.
De este modo, Sellés ha recuperado parte del dinero perdido, pero no todo. “Me parece una estafa enorme, en la que no he caído yo solo, y por la cual habrán obtenido importantes beneficios a cambio de nada de nada. Y tengo clarísimo que está hecho a posta porque, entre otras cosas, según su web me deberían de avisar del cambio de suscripción gratuita”, concluye este consumidor.
“No te avisan de cuando acaban”
En redes sociales, muchos estudiantes ensalzan a Scribd y aseguran que les ha “salvado la vida”, pero también hay quienes comparten la opinión de Sellés. “Las trampas de Scribd. Apúntate un mes gratis, te dicen. Pero no te avisan de cuando acaban y comienzan a cargarte 10 pelotes por mes. Ya me han sacado 50”, lamentaba un internauta en X (antigua Twitter).
“Me pasó lo mismo. Penoso, espero que nadie utilice el periodo de prueba fake”, le respondía otro usuario. “Me habéis hecho un cargo indebido. No habéis avisado de que terminaba el pedido de prueba”, coincidía un tercero. “Te odio, Scribd, no me mandaste correo para avisarme que ya se iba a terminar mi prueba gratis y me cobraste”, apuntaba, con cierto tono humorístico, una afectada sudamericana.
“Son unos rateros”
En Google Play, Scribd tiene más de 100.000 descargas y una puntuación media de 2,8 estrellas sobre 5. Así, se alternan los elogios (“me encanta Scribd”, “ayuda bastante” o “es fantástica”) con las críticas. “Denunciemos todos juntos”, comienza pidiendo un usuario insatisfecho. “Son unos rateros, te dicen que te van a dar la prueba gratis, me di de baja ANTES de que acabara el tiempo de prueba, además te dicen que te llegará un correo avisando antes de que termine (aviso que no llegó) y tienen dos meses cobrando más de 10 euros. Veo que hay muchas personas reclamando lo mismo”, añadía.
“No lo recomiendo, cancelé antes de la fecha acordada por la prueba gratis y después me quitaron $150 por algo que después ni siquiera abría, lastimosamente traté de cancelar de alguna u otra manera y seguían descontando de mi tarjeta de débito”, lamentaba otro afectado.
Pésimas valoraciones
En el foro de valoraciones Trustpilot, las reseñas son mucho peores: hay más de 3.400 opiniones y la mayoría son malas, ya que la puntuación media es de 1,6 estrellas sobre cinco. De nuevo, aparecen críticas por la renovación indeseada y se habla de “estafa”.
Consumidor Global ha contactado con Scribd para preguntar si consideran que el plan de pagos está suficientemente claro y si los cobros son tan transparentes como sería deseable, pero, al término de este reportaje, no ha obtenido respuesta.