La sensación de estar habituado a sobrellevar el peso de la inflación parece más que asentada entre los consumidores españoles. Con esta casilla de salida, el sesenta por ciento de los hogares cree que mantendrá sus ingresos durante los próximos meses, y en torno al noventa por ciento confía en conservar su puesto de trabajo. Estas son algunas de las cifras que acaba de hacer público el último estudio de 2022 elaborado por Kantar, empresa especializada en consultoría y análisis de datos.
En el documento se dan a conocer cuáles son a grandes rasgos las expectativas del consumidor de cara al medio plazo. A pesar del optimismo que encierran esos números, lo cierto es que existe una abrumadora mayoría que prefiere activar la alerta en tiempos de crisis. La actitud por la que están optando las familias españolas pasa por frenar el gasto o, como mucho, mantenerlo. De igual modo, también parece instalada la sospecha de que no es un buen momento para hacer grandes desembolsos que puedan resultar comprometedores al cabo de los años.
Mantener el consumo
De una forma más concreta, el informe, que se llevó a cabo durante el pasado mes de diciembre, señala que el cincuenta y uno por ciento de las personas encuestadas piensa que lo más apropiado ahora es conservar los mismos niveles de consumo.
Para la directora de marketing de Kantar Insights, Teresa Ledesma, una de las conclusiones del informe apunta al comportamiento que los consumidores están teniendo en los últimos meses. Todo parece indicar que la tendencia a la hora de la compra es más racional que impulsiva, de donde se desprende que sí existe cierta precaución.
Reforzar la seguridad digital
Desde Kantar recomiendan a los negocios reforzar sus estrategias de marketing para motivar a los compradores. Bajo el propósito de generar una mayor confianza entre la clientela y, en consecuencia, ser más productivas, las principales firmas están dedicando importantes partidas presupuestarias a robustecer la ciberseguridad de sus entornos digitales. La idea pasa por proteger al máximo los datos personales de los usuarios en las pasarelas de pago frente al peligro de los hackers, tomando como ejemplo el trabajo que llevan a cabo las grandes referencias en este campo: las entidades bancarias y las plataformas de juegos de azar.
Al respecto, los ecommerces han puesto el foco sobre la tecnología que incorporan los neobancos para cifrar la información sensible que sus clientes depositan en la web y que luego se transfiere hasta el servidor. El software predilecto que más se usa en esta tarea es sin duda el certificado SSL (Secure sockets layer), cuya función pasa por ocultar los números de cuenta y las claves privadas para que no queden al alcance de terceras personas.
Protocolos de verificación de identidad
Por su parte, los espacios dedicados al juego que operan vía internet se han convertido en verdaderos especialistas contra los delitos de suplantación de perfiles. No en vano, los mejores casinos online ya disponen de los protocolos de verificación de identidad más eficaces que existen. En este sentido, destaca el denominado sistema KYC, que se encarga de confirmar que el jugador que intenta acceder a una cuenta es realmente su propietario. El procedimiento empleado es tan sencillo como útil: las salas de ruleta o de máquinas tragamonedas solicitan de manera telemática al usuario toda la documentación que sirva para identificarlo al cien por cien.
Pese a la amenaza que parece dibujar el estudio de Kantar a corto plazo, las encuestas dejan un perfil mayoritario de encuestados que sigue confiando en su estabilidad laboral y que, por lo tanto, considera que la economía doméstica seguirá siendo cómoda o llevadera en los próximos meses.