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Así es el Zara más grande del mundo: 200 dependientes para una tienda de autoservicio
El grupo Inditex apuesta por la tecnología en su local insignia, lo que lleva a los consumidores a realizar todos los pasos necesarios para hacer una compra
Inditex continúa su apuesta por ubicar sus marcas en edificios emblemáticos en las principales calles comerciales del mundo. Y eso es justo lo que ha hecho con Zara. La firma insignia del grupo cuenta ahora con una macrotienda de cuatro plantas, y 200 dependientes, en pleno corazón de Madrid, en Plaza de España, a ambos lados del Hotel Riu.
Este Zara, de hecho, se ha convertido, al menos por el momento, en el más grande del mundo. Cuenta con casi 4.000 metros cuadrados de superficie comercial en la cual la compañía ha querido cambiar la experiencia de compra del cliente con un espacio más diáfano donde la tecnología es una pieza fundamental y el autoservicio, también.
Un mega Zara con colas virtuales y mucha tecnología
Inditex busca aunar la experiencia de compra física y online, sobre todo en la nueva tienda de Zara. Para ello, el cliente necesita la app de la firma, incluso a la hora de localizar las prendas. Esto se hace con la opción click and find, a través de la cual aparece un mapa de la tienda y se indica la zona en la que se encuentra la prenda.
Además, la tecnología también está muy presente en el área de probadores. Para acabar con las colas físicas, Zara opta por las virtuales. Para poder acceder a esta zona, el cliente debe reservar un espacio, o bien a través de la aplicación o con un QR que obtiene de la pantalla ubicada en esta área. Para los clientes más mayores o que no tengan móvil, el ticket para poder entrar al probador se lo facilitará un dependiente. En total habrá más de 200 en este establecimiento para orientar a todos los consumidores, muchos seguramente perdidos entre tanto funcionamiento automático.
Se prioriza el autocobro
El ‘yo me lo guiso, yo me lo como’ de este nuevo Zara no acaba aquí. En cada una de las áreas de la tienda hay una zona de pay and go, o lo que es lo mismo, de autocobro. Zara apuesta por la autonomía del cliente bajo la creencia de que no quiere esperar. Por eso, abundan más las cajas de autoservicio por la tienda que las tradicionales.
De esta manera, las prendas que el cliente quiere llevarse se depositan en una especie de cubo, que hace una lectura automática de las etiquetas. Una vez leídos todos los códigos aparece en la pantalla el total de unidades y el importe a pagar. El pago se realiza con tarjeta o a través del móvil. Y, de nuevo, el QR toma protagonismo para poder desalarmar las prendas. Es el último paso en el proceso de compra de este establecimiento.
Estreno de colecciones
Zara ha aprovechado su nueva joya de la corona para presentar en primicia ciertas colecciones que sólo vendía online. De esta manera, la firma de ropa expone por primera vez en una tienda física su colección de lencería, el catálogo de productos de belleza con los que cuenta y dos showrooms, dedicados al calzado y a la ropa deportiva.
Otro de los puntos novedosos a nivel mundial de este Zara es su buzón de devoluciones. Se trata de que se convierta en un punto más de entrega o devolución de paquetes. En el caso de querer usar este servicio, no obstante, se requiere de la app, donde el cliente debe solicitar la acción y marcar dicha tienda. Una vez hecho este trámite, de nuevo llega un QR que el consumidor debe presentar en la máquina de devoluciones del establecimiento. Una vez leído, se imprime una etiqueta y el cliente ya puede meter el paquete en el buzón.
Cierre de tiendas a nivel mundial
Inditex no ha querido detallar la inversión que ha realizado en esta nueva apertura. Sin embargo, para el periodo comprendido entre 2020 y 2022, la compañía tenía destinada una partida de 2.700 millones para acelerar la transformación de sus tiendas y el crecimiento online.
Mientras Marta Ortega inaugura ahora estos gigantes locales, a los que se le sumarán otros tres similares en Japón, Portugal y Catar, Pablo Isla anunció el cierre de hasta 1.200 tiendas en todo el mundo entre 2020 y 2022. El motivo de estas clausuras se debe a la falta de rentabilidad de estas tiendas. Inditex cerró 2021 con una facturación de 27.716 millones de euros y un beneficio neto de más de 3.000 millones, unos 400 millones menos que en 2019, antes de la pandemia.
A Inditex le gusta el centro de Madrid
Además de un Zara, Inditex ha abierto otro Stradivarius en la misma zona. De esta manera, el grupo aumentan su visibilidad en uno de los principales puntos neurálgicos de la capital. El establecimiento de Stradivarius, mucho más pequeño que el de su marca hermana, cuenta con un nuevo concepto de tienda. Bajo el nombre de Wave, la firma busca un espacio de líneas curvas y materiales naturales.
La disposición de esta tienda también cambia. Un pasillo central a modo de paralela se encarga de vertebrar la primera planta de la tienda en dos mitades. Y, además de nuevas colecciones de ropa, como la deportiva o la inspirada en la serie de Netflix, Los Bridgerton, el establecimiento cuenta con un espacio de exposición que, ahora, ocupa Eternidad, una experiencia inmersiva de la artista Rachel Valdés.
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