Apple tiene un objetivo que puede ser equiparable a la definición de milagro. Un ciego que ve. Un paralítico que anda. O un mudo que habla. La tecnológica trabaja desde la época de Steve Jobs en un proyecto confidencial que ha empezado a generar esperanza. Un reloj inteligente que mida la glucosa en la sangre sin la necesidad de recibir un pinchazo.
“Hay rumores sobre que Apple por fin desarrolló la tecnología para medir la glucosa con un Apple Watch. Sólo puedo imaginar lo genial que será para los que sufren esta enfermedad. Ojalá fuera cierto”, señala Enrique Ochoa, a quien su mujer le diagnosticaron diabetes gestacional durante el embarazo de su segundo hijo. Sin embargo, a priori, el invento de la empresa es una quimera.
No es una realidad (todavía)
Como a la mujer de Enrique, en España la diabetes afecta a casi seis millones de personas. Los datos recogidos por las encuestas nacionales y europeas de salud reflejan una tasa de 7,51 de cada 100 personas. Entre esas personas también está Margarita López que destaca a Consumidor Global que el reloj inteligente en el que está trabajando Apple “sería perfecto para los diabéticos con insulina que se tienen que medir regularmente”.
Actualmente, para controlar el azúcar, están los glucómetros clásicos que miden la glucemia capilar en una gota de sangre obtenida por punción de un dedo y los dispositivos de monitorización continua de glucosa que determinan la glucemia intersticial utilizando una cánula localizada en la dermis. Pero, según la jefa de servicio de Endocrinología de los hospitales universitarios HM Montepríncipe y HM Torrelodones, Pilar García, no es una realidad (todavía) poder medir la glucosa sin tener contacto con la sangre del paciente.
Diabetes sin pinchazo
“Apple no especifica en la patente que su objetivo sea analizar el nivel de glucosa en sangre. Pero es evidente que esa es su intención”, señala García. “De conseguirlo, la empresa contaría con un dispositivo capaz de controlar tres variables de gran importancia en la salud: actividad física, corazón y glucosa. Todo ello desde la comodidad de un reloj que llevamos siempre encima”, imagina la doctora.
Entre las especulaciones sobre esta tecnología, fuentes cercanas al proyecto de la compañía con sede en Cupertino (Estados Unidos) afirman que se está elaborando un nuevo chip conocido como fotónica de silicio y un proceso de medición denominado espectroscopia de absorción óptica. Este sistema emite a través de un láser unas ondas de luz por debajo de la piel que son capaces de detectar la concentración de glucosa y gracias al algoritmo que lleva equipado puede determinar los niveles en sangre.
Una misión casi imposible
Apple, que lleva más de 12 años trabajando en este proyecto, considera que este sistema se encuentra en una etapa de prueba de concepto. La empresa cree que la tecnología es viable, pero debe reducirse a un tamaño más práctico. Eso sí, desde Apple aseguran a Consumidor Global que “no han hecho ninguna comunicación oficial sobre el asunto. Lo que hay publicado son especulaciones”.
Parece una misión casi imposible. De hecho, numerosas empresas emergentes, y algunas de las empresas más grandes del mundo, han intentado sin éxito desarrollar un sistema de monitoreo no invasivo. En 2014, Google anunció planes para fabricar lentes de contacto inteligentes que pudieran medir la glucosa en sangre a través de lágrimas. En 2018 abandonó el complejo proyecto. “Además, desde Apple todavía no han publicado datos de su exactitud en términos de MARD (o universal performance standard for CGM systems). Falta mucha información y, por supuesto, que sea aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA)”, advierte García.
Tipos de diabetes
Existen tres tipos de diabetes. La tipo 1 afecta entre el 5 y el 10 % de los que padecen esta enfermedad y deben recibir insulina todos los días para sobrevivir. Con la diabetes tipo 2, que afecta al 90 o 95 % de las personas con diabetes, basta con regular la alimentación y establecer hábitos saludables. Es un proceso que evoluciona a lo largo de muchos años y generalmente se diagnostica en los adultos. Es posible que no presente síntomas, por lo que es importante realizar un análisis del nivel de azúcar en la sangre.
Por último, está la diabetes gestacional, que aparece en mujeres embarazadas que nunca han tenido diabetes. Generalmente desaparece después de que nace el bebé. Sin embargo, puede aumentar el riesgo de tener diabetes tipo 2 más adelante, por lo que la paciente deberá continuar midiendo regularmente el nivel de glucosa.
Controlar la diabetes
Para la diabetes tipo 1, el paciente debe inyectarse insulina porque su cuerpo ya no produce esta hormona. Tiene que hacerlo varias veces al día, incluso con las comidas. También se puede utilizar una bomba de insulina, que administra pequeñas dosis constantemente durante todo el día. La bomba se usa fuera del cuerpo en un cinturón o en un bolsillo o bolsa. Está conectada a un pequeño tubo de plástico y a una aguja muy pequeña que se inserta debajo de la piel y permanece varios días en su lugar.
Hay otras herramientas como el medidor continúo de glucosa, un dispositivo que permite monitorizar la glucosa en el líquido intersticial de forma continua mediante un sensor que se lleva insertado en el tejido subcutáneo. Sin embargo, el método más utilizado para el autocontrol de la diabetes son las tiras reactivas de glucosa, es decir, pequeños trozos de plástico que disponen en un espacio los elementos reactivos necesarios para que, una vez entre en contacto con la sangre, reaccionen de forma que se pueda determinar químicamente la cantidad de glucosa en sangre.
Con insulina y sin insulina
“Debemos diferenciar entre las personas con diabetes que se administran insulina diariamente y las que no lo necesitan. Actualmente, se subvencionan las tiras reactivas a aquellas personas que se administran insulina y nunca ha dejado de hacerse”, explica la doctora Pilar García. “Para las personas que siguen otro tipo de tratamiento para su diabetes, no es tan imprescindible medir el nivel de glucemia a diario, y es verdad que no se les está facilitando la adquisición de tiras reactivas”, reconoce.
Las personas con diabetes tipo 2 o con diabetes gestacional la pueden controlar con opciones saludables de alimentación y haciendo más actividad física. Pero, en algunos casos, también será necesario pastillas e inyecciones de insulina. Además, con el tiempo, es posible que se necesite más de una medicina. Incluso si no se usa insulina, se puede necesitar en ocasiones especiales. La realidad (todavía) es que el pinchazo para controlar la diabetes va a seguir y el Apple Watch para medirla es (aún) una ilusión.