Caminar por la Gran Vía de Madrid y encontrarse una botella gigante de Tanqueray sujeta por una enorme grúa y virtiendo su ginebra sobre un vaso que no es otro que el icónico cartel de Schweppes que reina la plaza de Callao. Es la imagen que ha creado la marca de Diageo y que ha sido posible gracias a la publicidad exterior simulada o fake out of home.
La campaña combina tecnología CGI (imágenes creadas por ordenador) e inteligencia artificial para generar un vídeo que reúne una mezcla casi natural para el consumidor: ginebra Tanqueray y tónica Scheweppes. Además, lo hace utilizando como referencia visual principal el icónico luminoso situado en la Gran Vía.
Un gintonic gigante
El cartel, instalado en el edificio Carrión en 1969, ha sido objeto de las miradas de los transeúntes durante más de cincuenta años. Desde la marca señalan, en un comunicado, que desde su construcción se ha mantenido en solitario a 37 metros de altura y que “le faltaba algo”, en este caso, Tanqueray.
El resultado de la campaña se puede comprobar en este vídeo de Instagram en el que varios transeúntes presencian el supuesto vertido de whiskey sobre el luminoso de Schweppes.